El Gobierno español insta a las partes, en un ejercicio de responsabilidad histórica, a aceptar dicho acuerdo con urgencia.
España reitera que está dispuesta a apoyar a este nuevo gobierno, que deberá promover la reconciliación nacional, retomar la transición democrática y superar la crisis política, económica y de seguridad en la que está inmersa Libia actualmente.