Intervención del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en rueda de prensa conjunta con el presidente de la República de Colombia, Gustavo Petro

Palacio de la Moncloa

INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL GOBIERNO, PEDRO SÁNCHEZ

Bueno, buenas tardes.

Gracias a los medios de comunicación y también a los integrantes de ambas delegaciones y muy especialmente al presidente Petro, al cual, pues lo recibimos como un honor, y es lo que me gustaría resaltar. Esta, le comentaba al presidente Petro, es la única visita de Estado que vamos a tener en España en el año 2023, y creo que ese es el mejor indicador de la relevancia que nuestro país, España, otorga a la relación con un país como Colombia, con el que nos unen tantos lazos e intereses compartidos.

Colombia y España comparten también un ambicioso programa de reformas, de transformaciones, que ha sido objeto de debate en nuestro encuentro y también de compartir información y que están dando sus frutos, ¿no?

Me van a permitir también que haga una referencia a estos datos históricos de empleo en nuestro país, que hemos conocido hoy con 420.000 afiliados y afiliadas en los cuatro primeros meses del año, superando la cifra inédita de 20.600.000 afiliados y afiliadas a la Seguridad Social, 73.890 parados menos en el mes de abril, lo que nos deja en la cifra más baja desde el año 2008 y con menos de 200.000 jóvenes en paro.

Es decir, estamos hablando de mínimos históricos, lo cual es algo que nos alegra, y nos alegra, no porque sea un éxito del Gobierno de España, sino porque es un éxito del conjunto de la sociedad española. En plena guerra y tras una pandemia tener un país que crece más que la media europea, que crea más empleo y además que crea un empleo de mejor y mayor calidad, es algo que, desde luego es un éxito, es un éxito de país.

Y estos datos, si demuestran algo, es precisamente la fortaleza de España y la bondad de las reformas que estamos emprendiendo, las políticas económicas que estamos implementando, a pesar, como he dicho antes, de haber atravesado una pandemia y en mitad todavía, por desgracia, de la guerra en Ucrania.

Creo que la reunión que hemos mantenido hoy, querido presidente, es extraordinariamente positiva para nuestros dos países.

En primer lugar, le he reiterado al presidente Petro el compromiso de España, del conjunto de la sociedad española, no solamente del Gobierno, de apoyar su ambicioso plan, también valiente proyecto de Paz Total que tiene como objetivo construir una paz amplia y duradera en Colombia.

España, como saben, es un país acompañante en el proceso de diálogo con el Ejército de Liberación Nacional y, en este sentido, he trasladado al presidente Petro nuestro compromiso, el compromiso del Gobierno de España de seguir apoyando y fortaleciendo las necesidades de este proceso de paz, aportando un millón de euros en el año 2023.

También le he trasladado al presidente nuestro apoyo a las reformas sociales y las estratégicas que está implementando en Colombia. El Gobierno de España, pues evidentemente comparte muchos de los objetivos de esas reformas: promover la justicia social, fortalecer las instituciones democráticas, llevar a cabo una reforma fiscal progresiva, devolver su relevancia a la gestión pública, a las políticas públicas, proteger a los colectivos más vulnerables reduciendo esa desigualdad económica y social que, por desgracia, nuestras sociedades aún sufren.

En segundo lugar, hemos reiterado la voluntad de ambos países para seguir profundizando nuestra cooperación bilateral a través de los muchos ámbitos que nos unen.

Y así lo estamos reflejando en la declaración final que hemos acordado.

Hemos firmado acuerdos en diversas áreas que me gustaría, aunque sea de manera sucinta, referir: en educación, muy importante, va a dar acceso a estudiantes de ambos países a los respectivos sistemas de educación superior, la lucha contra la delincuencia, la seguridad, el deporte, la cooperación social y laboral, el transporte, las infraestructuras ferroviarias.

También la conectividad en el ámbito económico, todo lo que tiene que ver con la inversión y la intensa relación comercial que tenemos.

En definitiva, creo que desde el punto de vista bilateral estamos reforzando nuestras relaciones.

En el encuentro empresarial de esta mañana, pues se ha avanzado en esa dirección dando continuidad al Foro Económico que se organizó en Bogotá con ocasión de mi visita a Colombia en el pasado mes de agosto.

Y hoy hemos hablado de proyectos concretos en sectores muy importantes de alta incidencia para la sociedad colombiana y también española, como es el aeronáutico, la conectividad, los ferrocarriles, los satélites, la digitalización de la sanidad, en las que empresas españolas van a poner tecnología y knowhow al servicio del desarrollo y la cohesión social y territorial en Colombia.

Hemos firmado algo muy importante, es un protocolo financiero entre los Ministerios de Comercio, en nuestro caso de Industria y Turismo, de ambos países, y les anuncio que España va a poner a disposición mil millones de euros a través de diferentes instrumentos de cooperación en el comercio, en la inversión, para la financiación de proyectos en sectores prioritarios con empresas españolas.

En tercer lugar, hemos hablado de esta importante cumbre de la Unión Europea y la CELAC que va a tener lugar en Bruselas el próximo mes de julio. Creo que ambos ejecutivos compartimos la importancia de que la región latinoamericana tenga una voz internacional propia, la relevancia de contar con un refuerzo en la relación política, económica, social y cultural de Colombia con la Unión Europea y también, lógicamente, de la comunidad latinoamericana.

De ahí la importancia que le damos desde el Gobierno de España, lógicamente, a esa Cumbre de la Unión Europea con la CELAC, que no se celebra desde el año 2015. Yo creo que esto también siempre hay que recordarlo por las oportunidades perdidas que ello ha representado, pero también por la voluntad política que estamos demostrando de reforzar y relanzar estas relaciones.

También compartimos, pues como no puede ser de otra manera, la necesidad de superar el bloqueo político en Venezuela, que se prolonga ya durante demasiado tiempo.

España, como saben los medios de comunicación tanto de Colombia como de España, participó en la Conferencia Ministerial que el presidente Petro organizó la semana pasada en Bogotá con objeto de relanzar el diálogo entre Nicolás Maduro y la oposición, algo que consideramos que es vital para encontrar una solución a la crisis que ya dura demasiado tiempo en Venezuela, y que sea una solución que llegue cuanto antes.

Ambos queremos participar en la búsqueda de salidas para la aguda crisis migratoria que sufre la región, con un impacto muy directo en Colombia. Y quiero subrayar el papel de Colombia en la acogida de refugiados y de refugiadas.

Es un ejemplo, creo, querido presidente, de solidaridad, que ennoblece al pueblo colombiano y que España valora desde la más absoluta empatía.

Es necesario abordar las causas de esta crisis desde su raíz. Ese es el planteamiento que siempre ha tenido España cuando hemos tenido que afrontar, no crisis de refugiados, sino en este caso, las crisis migratorias que también ha sufrido España.

Y, en paralelo, debemos encontrar soluciones urgentes, como la creación de vías de migración legales, ordenadas, seguras. Una materia en la que España, creo, es un referente a seguir a nivel europeo.

Y, en ese contexto, pues ambos países hemos renovado un acuerdo de migración circular muy importante, cuya primera fase concluyó con éxito, y que nos va a llevar a doblar el número de beneficiarios y beneficiarias. Yo creo que esto es muy relevante. Y, del mismo modo, estamos tratando de buscar soluciones para este drama humanitario que tiene lugar en la región del Darién, entre Panamá y Colombia, una de las rutas migratorias más complejas, también las más peligrosas del mundo, en la que la acción internacional, coordinada con los países afectados, resulta esencial.

En cuarto lugar y, por último, hemos acordado trabajar ante la emergencia de los grandes desafíos con carácter global. Desafíos ante los que compartimos, creo, una misma visión y a los que debemos responder siendo conscientes de su trascendencia y de su urgencia, no sólo para nuestras respectivas ciudadanías, sino por su impacto mundial y sus efectos en las futuras generaciones.

Y, en esos términos, creo que la lucha contra la emergencia climática es una prioridad para ambos Gobiernos y por eso quiero agradecer -se lo he dicho personalmente al presidente Petro- que haya anunciado la intención de Colombia de unirse a la Alianza Internacional para la Resiliencia ante la Sequía, que lanzamos conjuntamente España con Senegal en la COP27 en Sharm el-Sheij.

Se trata de una iniciativa de la que ya forman parte 31 países, cuyo objetivo es compartir buenas prácticas, desarrollar proyectos relacionados con la desertificación y la gestión del agua. Saben ustedes que España, desgraciadamente, lleva ya muchos meses sufriendo un problema de sequía muy grave.

España, lógicamente por ubicación geográfica, es un país enormemente expuesto según nos dice la ciencia, a las consecuencias de esta emergencia climática. El impacto de esta amenaza real es devastador, no sólo para nuestra agricultura, que es una industria muy potente en nuestro país, sino para la supervivencia de tesoros naturales, la biodiversidad de nuestro país, que también es extraordinariamente rica.

Y, en ese sentido, yo quiero también señalar que Colombia es un referente global en biodiversidad. Es un país crucial para librar una batalla en la que debemos unir fuerzas al amparo de la ciencia, que lleva décadas advirtiendo sobre la emergencia climática.

Y, en este sentido, ambos países compartimos también el interés por impulsar la necesaria transición energética para que sean las energías verdes las que muevan a nuestras industrias y también a nuestras sociedades.

En definitiva, no me quiero extender más, compartimos, querido presidente, creo que una visión esperanzadora sobre las enormes oportunidades de la transición ecológica y también de la transformación digital en nuestras sociedades.

Pero debemos hacerlas -y esto ha sido objeto también de debate - efectivas desde la justicia, desde la democracia y desde la cohesión social y territorial, abogando por una transformación que cree más inclusión y no deje perdedores por el camino.

En resumen, para mí, querido presidente, es un auténtico placer poder recibirte aquí, en el Palacio de la Moncloa. Creo que se abre una etapa muy importante para reforzar los vínculos que nos unen a ambos países.

También es cierto que partimos de una base extraordinariamente sólida a partir de la relación histórica fructífera y larga entre ambos países.

Y ahora, por lo tanto, es el momento de reforzar ese impulso en beneficio de nuestras sociedades, a las que nos une no sólo una lengua y una cultura llena de referentes comunes, sino un futuro lleno de esperanza y también la voluntad compartida de afrontar unidos y unidas los grandes retos que tenemos por delante.

Y sin más, presidente, pues te cedo la palabra.

P.- [Diego Bonilla, Revista Semana] Gracias, presidente. Buenos días, buenas tardes, perdón. Presidente Sánchez, usted comprenderá que, por supuesto, para nuestro país el tema de la paz es sumamente importante, porque, además, si se consolida la Paz Total, pues podrían implementarse otro tipo de políticas sociales del gobierno del presidente Petro.

En ese sentido, ustedes acaban de hacer un anuncio tanto económico como para que el ELN salga de esa lista de terroristas.

Quiero preguntarle, ya que usted va a estar en el Consejo de la Unión Europea, en la Presidencia, ¿cómo lograr esa mediación? ¿Cómo hacer para que realmente la Paz Total de nuestro país avance? Además, porque hay otros grupos con los que se va a empezar a negociar, no solamente con el ELN, ¿cómo consolidar realmente ese proceso y cómo España va a ayudar con la Unión Europea para avanzar en esa materia? Gracias.

Presidente-. Muchísimas gracias, Diego, por sus preguntas.

Digamos que, desde nuestro punto de vista, como tercer país, en este caso España, lo que hemos mostrado es nuestra absoluta disposición al gobierno del presidente Petro para ayudar, en lo que podamos ayudar.

Desde el punto de vista económico, con el anuncio que hemos hecho, desde luego, agradezco mucho el que el presidente Petro haya reconocido a España como un país que puede participar en el proceso de negociación y, como él ha dicho, en función de cuál sea el avance en ese proceso de negociación y de diálogo, pues evidentemente nosotros, a disposición del presidente y del Gobierno colombiano, para hablar con el resto de socios europeos y efectivamente materializar esas peticiones que haga el presidente Petro y el gobierno colombiano.

Pero, en todo caso, me parece que es muy prematuro ahora decir cuál va a ser la posición de España, porque evidentemente va a estar, si no total, sí muy condicionada por lo que nos diga el gobierno colombiano.

P.- [Javier Portillo, Vozpópuli] Buenas tardes.Traslado las preguntas de todos mis compañeros de la prensa española.

Al presidente Sánchez, la Comisión Europea ha hecho una propuesta para endurecer las penas de la malversación en una línea distinta a la que ha definido el Gobierno en su última reforma. ¿Va a corregir el Gobierno esa última reforma siguiendo el criterio de Bruselas? El líder del Partido Popular ya ha ofrecido sus apoyos para ello.

¿Qué valoración hace de la gestión de la ministra de Justicia, que está afrontando una serie de huelgas de jueces y fiscales y personal de Justicia por sus condiciones laborales?

Y, por último, con toda la actuación del ministro Bolaños en el acto institucional del 2 de mayo, con su consentimiento, ¿cree que fue un error? Gracias.

Presidente.- Gracias, Javier. Si te parece, presidente, respondo yo primero.

Sobre la primera de las cuestiones, sobre la propuesta de la Comisión Europea, estamos en las fases iniciales. Yo creo que la valoración que hace el Gobierno de España es que es una buena noticia que se armonicen la legislación a nivel europeo para luchar contra la corrupción. Y, en ese sentido, a España le coge con los deberes hechos, entre otras cuestiones, porque en esa reforma del Código Penal, por ejemplo, incorporamos el delito de enriquecimiento ilícito, que no está reconocido por distintos Estados miembros y que, en cambio, España sí ha incorporado a su Código Penal.

En relación con la ministra de Justicia y las negociaciones, bueno, yo creo que la voluntad de negociación es absoluta por parte del Gobierno español. Lo hemos demostrado siempre, desde luego, con la función pública con la cual hemos llegado a acuerdos y, bueno, vamos a esperar a saber cuál es la respuesta de estos funcionarios sobre la propuesta que puso ayer encima de la mesa el Gobierno.

Y, finalmente, sobre la polémica del 2 de mayo, a ver, yo creo que hay algo que no podemos olvidar. Creo que son unas mínimas reglas para la convivencia. Y es que en una democracia se han de respetar las reglas y las instituciones públicas con independencia de qué color político gobierne una u otra institución, con independencia de cuál sea el territorio al que nos refiramos. Sea Madrid, o sea Cataluña, o sea el Gobierno de España. Y, por tanto, creo que lo relevante es siempre respetar las reglas, porque si no se respetan las reglas, quien no las respeta pierde toda razón.

(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)
(Intervención original en español)