Saludo del presidente del Gobierno a las unidades españolas desplegadas en el exterior en misiones de paz y humanitarias

Madrid

Buenos días. Llegadas estas fechas navideñas, tan especiales y sentidas para todos, es un honor dirigirme a todos vosotros y vosotras. Hoy no os hablo sólo como presidente del Gobierno de España, sino como portavoz de todo un país que os admira y que está orgulloso de vuestra labor.

Entramos ya en la recta final de este 2020. Un año muy difícil, muy complejo, un año en el que la pandemia del Covid19 ha provocado mucho dolor y sufrimiento en España y en el mundo.

Muchos de vosotros habéis sido parte de la Operación Balmis, habéis estado en primera línea de apoyo a nuestro país en tiempos muy difíciles. Después de haber ayudado a vuestros compatriotas en las calles, en hospitales del país, o residencias de mayores en España, en las labores de rastreo, estáis ahora desplegados en el exterior para ayudar a otros muchos que os necesitan para avanzar hacia un futuro mejor, más seguro y más próspero.

Sois claro ejemplo de servicio a España y al conjunto de la comunidad internacional.

En estas fechas, el cumplimiento de vuestra misión -soy consciente de ello-- no os permite estar en casa, con la familia, con vuestros amigos, con vuestras parejas. Hoy, la distancia física os aleja de vuestro hogar; pero me gustaría trasmitiros un sentimiento compartido por todos los españoles, y es que cada uno de vosotros y vosotras, también vuestras familias, estaréis muy presentes en nuestros corazones y en nuestro pensamiento. Y desde aquí os hago llegar nuestro afecto, nuestro reconocimiento y, más aún, nuestra más firme expresión de gratitud.

Vuestro empeño en las misiones internacionales nunca nos va a ser ajeno. Vuestra entrega por la paz y la seguridad de todos es muestra tangible de abnegación, de sentido del deber y afán de servicio, pero también de una constatada profesionalidad y saber hacer. Todas estas cualidades, a las que se une también vuestra cercanía, representan las mejores virtudes de unas Fuerzas Armadas del Siglo XXI, modernas y capaces, que realizan una labor leal, callada al servicio de nuestra democracia.

Hoy, como un pilar fundamental de nuestra política exterior, estáis desplegados en lugares lejanos, en países que a veces no están presentes en nuestro imaginario colectivo. Y lo hacéis trabajando por recuperar la paz. Permanecéis junto a una población que sufre las consecuencias de los conflictos, del desgobierno, del terrorismo global.

Estáis ahí, en primera línea, para salvaguardar también la seguridad y la prosperidad de España y de vuestros compatriotas.

En 2020, 8.120 militares -7.490 hombres y 630 mujeres- habéis cumplido con vuestro deber en el exterior y sois la materialización más evidente del compromiso de nuestro país con un mundo más pacífico, seguro y estable.

Y para conseguirlo, os habéis preparado a conciencia para ser lo más eficaces y eficientes en el terreno. Y sabemos que lo habéis conseguido. El buen hacer dentro de las organizaciones internacionales -Naciones Unidas, la Unión Europea y la OTAN-, pero sobre todo el cariño y respeto que os brinda la población local, atestiguan vuestro ya consolidado prestigio.

Nuestros militares despliegan en Mali, en República Centroafricana, en Somalia, Yibuti, Afganistán, Irak, Líbano, Turquía, Bosnia y Herzegovina, Letonia y Colombia; surcan las aguas del Mediterráneo, del Atlántico, del Pacífico y del Índico; sobrevuelan el continente africano o contribuyen a la investigación científica en la Antártida. Además, y en el ámbito de la Diplomacia de la Defensa, están presentes en Senegal y en Mauritania.

Todo este importante despliegue es el mejor legado español en el mundo, y también el mayor ejemplo del multilateralismo activo que España defiende en el ámbito internacional. Gracias a vuestro trabajo, los españoles y las españolas nos sentimos más seguros y el mundo es hoy un lugar menos peligroso.

Quiero, también, que mis últimas palabras sean para poner en valor vuestro esfuerzo en el exterior, más aún en estas fechas tan señaladas. Pero, sobre todo, permitidme que sirvan para honrar a los 188 hombres y mujeres que, en estos 31 años de misiones en el exterior, dieron su vida en defensa de España y de la paz mundial. Siempre honraremos su recuerdo y siempre estaremos cerca de sus familias.

En estos días navideños, sé que sentiréis aún más la fortaleza y la calidez de la "familia militar". Permitidnos a todos los españoles, a todas las españolas, aun en la distancia, unirnos a vosotros, a vosotras, y a vuestras familias con orgullo y con un profundo sentimiento de agradecimiento.

También trasmitiros una orden: cuidaos y protegeos; y volved pronto a casa con la "noble satisfacción del deber cumplido", una máxima castrense que os representa de modo indiscutible a vosotros y a vosotras. Unas Fuerzas Armadas que sois ejemplo de esfuerzo, de resistencia y de moral de victoria.

En nombre de toda España y en el mío propio, os deseo unas Feliz Navidad y un próspero 2021.

Muchas gracias.

(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)