XXV Cumbre Hispano-Francesa

20.2.2017

  • x: abre ventana nueva
  • Whatsapp: abre ventana nueva
  • Linkedin: abre ventana nueva
  • Enviar por correo: abre ventana nueva

Málaga

Presidente.- Señor presidente de la República Francesa, señoras y señores ministros, señoras y señores, muy buenas tardes.

Como saben, hemos celebrado hoy en Málaga la XXV Cumbre bilateral Hispano-Francesa. La última Cumbre fue en diciembre de 2014 y me alegra poder anunciarles que, tras un paréntesis, volvemos a reanudar estos importantes encuentros al más alto nivel político.

Quiero, en primer lugar, dar la bienvenida a mi amigo, el presidente François Hollande, y a su delegación. François Hollande ha demostrado ser un buen amigo de España y conviene recordarlo. Confío en que se haya sentido hoy en su casa, en esta siempre bella y acogedora ciudad de Málaga, que ha sufrido este fin de semana los efectos de un fuerte temporal del que se recupera con el esfuerzo de sus vecinos.

Málaga es una de las grandes ciudades españolas y capitales europeas del Mediterráneo que compartimos, y a su indudable atractivo le acompañan un fuerte dinamismo económico, una imbatible oferta cultural y, sobre todo, la energía y la alegría de su gente.

Bienvenidos a Málaga, señor Presidente, señores ministros, señores miembros de la delegación francesa; bienvenidos a Andalucía y bienvenidos siempre a España.

Como todos ustedes saben, Francia y España están unidas por lazos muy estrechos y diversos. Somos socios, amigos y vecinos. Somos países europeos y mediterráneos, con siglos de historia compartida y un futuro común como protagonistas en el proceso de integración europea. En Málaga estos vínculos son especialmente patentes en dos instituciones que representan el enriquecedor mestizaje cultural que una a nuestras sociedades: el Centro Pompidou, donde estamos, cuya sede en París celebra este año su cuadragésimo aniversario, y el Museo Picasso.

Fue precisamente un ciudadano de esta tierra, Pablo Ruíz Picasso, quien hizo de Francia su hogar y creó desde allí algunas de las obras más importantes de la historia del arte que enorgullecen hoy, tanto a sus conciudadanos de origen, como de adopción.

En esta reunión que hemos celebrado en el día de hoy, hemos mantenido algunas reuniones sectoriales; yo mismo he mantenido, con nuestros colaboradores más próximos, una reunión con el presidente de la República y voy a intentar resumir, sabiendo que hay una Declaración Conjunta que hemos aprobado, los asuntos que a mí me parecen más significativos.

En primer lugar, hemos hablado de lo que está ocurriendo en Europa y, sobre todo, de lo que debemos hacer para que en el futuro ocurran cosas buenas en el proceso de integración europea. Como todos ustedes saben, el próximo día 25 de marzo tendrá lugar en Roma el aniversario, el 60º, desde la celebración del Tratado de Roma del año 1957, y creo que es un magnífico momento --ésta es mi opinión-- para hacer balance de lo que ha sucedido en estos sesenta años y, sobre todo y lo más importante, para plantear el futuro para los próximos años.

Yo tengo que decir que en un momento en que se oyen voces --se oyen más de lo que realmente significan-- en contra del proceso de Unión Europea y en contra del proceso de integración europea, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, es conveniente recordar lo que ha ocurrido en estos sesenta años.

En los sesenta años anteriores al Tratado de Roma, en Europa hubo dos guerras mundiales; desde entonces, Europa se ha convertido en un espacio de paz, libertad, democracia y derechos humanos. Europa es la primera potencia económica del mundo y es la primera potencia comercial del mundo. Europa es el lugar que mejor atiende a sus ciudadanos; un Estado de Bienestar como no existe en ningún otro lugar: un sistema de pensiones público, sistemas de sanidad y de educación para todos, buenas infraestructuras… Un lugar al que todos quieren venir y del que nadie quiere marchar.

Por tanto, reivindiquemos lo que de positivo ha tenido Europa para la vida de los europeos en estos años y, sobre todo y particularmente, para nuestro país, España, que el año pasado celebró el 31 aniversario de su ingreso en las entonces Comunidades Europeas.

En segundo lugar, creo que en Europa debemos hacer un esfuerzo para seguir dedicándonos a esos asuntos que importan a los ciudadanos y que quedaron muy claros en los acuerdos a los que llegamos en la última Cumbre que tuvo lugar en Bratislava, después del verano del año pasado, 2016. Las grandes prioridades tienen que ser el tema de la inmigración; en segundo lugar, la lucha contra el terrorismo; en tercer lugar, la seguridad exterior y la defensa europea, y, en cuarto lugar, crecer y crear empleo para, así, cada vez tener un mejor Estado de Bienestar y mejores pensiones, y así cada vez poder atender mejor a las personas a las que le va peor en esta vida.

Y el tercer gran objetivo, en mi opinión, de la Cumbre que tendrá lugar en Roma ese día 25 de marzo, al que antes me he referido, es ya plantear algunas ideas y fijar criterios de hacia dónde debemos ir en el futuro. Mi opinión es que, además de atender con la mayor intensidad de que seamos capaces los problemas reales de hoy debemos de hablar ya del futuro. Creo que Europa debe seguir con mucha claridad apostando por el Mercado Único. El Mercado Único de la Energía y el Mercado Único Digital son dos prioridades fundamentales; afectan claramente a la competitividad de nuestras empresas y, por tanto, a la creación de empleo, a la generación de riqueza y a la mejora de los pilares básicos de nuestro Estado de Bienestar. Creo que debemos de seguir avanzando en la Unión Económica y Monetaria, y pienso también que es el momento de plantearse la Unión Fiscal.

Sin duda alguna, será un debate instructivo pero, sin duda alguna, después de los acontecimientos que se han producido en los últimos tiempos, creo que ha llegado el momento para que aquellos que creemos en Europa lancemos un mensaje nítido y claro, y el mensaje es: estamos más unidos que nunca, queremos más integración que nunca y vivimos en la región del mundo con mejor nivel del mundo. Y nuestro objetivo y nuestra apuesta es que cada vez sea mejor.

También hemos tratado temas que afectan a las relaciones bilaterales y que también preocupan, como es natural, al conjunto de los ciudadanos españoles. Permítanme que me refiera solamente a dos o tres, que creo que tienen importancia e interés para el conjunto de la opinión pública española.

En primer lugar, hemos firmado un acuerdo con el Gobierno francés para la cesión y traslado a España de la documentación que los tribunales franceses han acumulado en los años de la lucha contra ETA. Son dosieres muy voluminosos que recogen los sumarios y las investigaciones llevadas a cabo durante tantos años de colaboración. Yo he agradecido especialmente al presidente Hollande esta decisión, y a su ministro de Justicia, porque esto nos permitirá continuar, en la labor de memoria, dignidad y justicia, nuestro compromiso con las víctimas del terrorismo. Toda esta documentación y efectos pasarán a formar parte de los fondos del Memorial de las Víctimas del Terrorismo que se está poniendo en marcha, como todos ustedes saben, en la ciudad de Vitoria.

En segundo lugar, quisiera también hacer un comentario importante, porque afecta y mucho a la competitividad de nuestras economías: las interconexiones. Sobre el proyecto de electricidad del Golfo de Vizcaya hay un estudio, como todos ustedes saben, ya de viabilidad y el siguiente paso es la notificación del transportista francés a su regulador y a su Gobierno. La Ministra ha dado instrucciones para que las cosas se hagan de manera rápida y se lo agradecemos de manera muy especial. Sabe que es un tema que aquí nos importa mucho y sabe que hubo una importante reunión, a la que asistieron el presidente de la República, el primer ministro del Gobierno de Portugal, el presidente de la Comisión Europea y yo mismo hace un par de años. El proyecto se presentará en 2017 para obtener financiación europea.

También, se ha hablado de los proyectos eléctricos en los Pirineos y del MidCat; como saben, gas a través del Pirineo catalán. Siguen los estudios según el calendario previsto y la idea es presentar los proyectos en 2018 para obtener la financiación europea.

Estos proyectos serán objeto de análisis en mayo de 2017 por el Grupo de Alto Nivel Comisión Europea+Francia+España+Portugal, para poder terminarlos en tiempo previsto.

Y también es importante informarles de que hemos hablado de las redes transeuropeas de transporte. Fundamentalmente, me voy a referir a las de transporte ferroviario y hemos impulsado algunas actuaciones.

En el Corredor Mediterráneo, España está trabajando en numerosos tramos de este Corredor, que tiene una inversión prevista muy grande y que, como próximos hitos, pondrá en marcha tramos como Castellón-Valencia, acceso a Murcia o Tarragona-Vandellós. Francia unirá Nimes con Montpellier este año y continuará en el futuro hasta la frontera. Y España y Francia están gestionando, a través de una sociedad conjunta, desde comienzos de este año el tramo Figueras-Perpiñán.

También, en el Corredor del Atlántico este fin de semana han comenzado las obras para dotar de ancho internacional entre Donostia e Irún; continuarán las obras de la Y vasca, y en Francia han declarado de utilidad pública Burdeos-Dax; llegará allí el AVE dentro de unos años.

Yo creo que esto puede resumir lo que, en mi opinión, son los aspectos más significativos de lo que hemos tratado en el día de hoy. Insisto, las relaciones bilaterales son importantísimas para nuestro país, y creo que también para Francia; han ido muy bien. El presidente Hollande y yo, y nuestros Gobiernos, nos hemos entendido muy bien a lo largo de estos años. Hemos colaborado intensamente en la lucha contra el terrorismo; sin duda, uno de los grandes objetivos de todos los países europeos en este momento. Las relaciones económicas son muy importantes: Francia es nuestro primer cliente, como saben, y es el segundo emisor de turistas hacia España, y el objetivo fundamental es que en el futuro próximo podamos seguir colaborando, trabajando en defensa de los intereses de los ciudadanos franceses y españoles y, con ellos, del conjunto de los ciudadanos europeos.

Le agradezco al presidente Hollande su presencia hoy aquí, en esta acogedora ciudad de Málaga. Creo que ha sido una Cumbre bilateral que ha producido resultados y le deseamos los mayores éxitos en su futuro. Cuenta con el aprecio y con el cariño de todos los ciudadanos españoles.