Rueda de Prensa tras el Consejo Europeo extraordinario

Preguntas y respuestas a los medios de comunicación

25.11.2018

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P.- Teniendo en cuenta el Acuerdo alcanzado, y una vez, tanto el Reino Unido como Gibraltar salgan de la UE, ¿cree llegado el momento de plantear el debate de la cosoberanía? Y, en el caso positivo, ¿cómo piensa hacerlo, habida cuenta de que los gibraltareños no parecen estar de acuerdo? Gracias.

Presidente.- Bueno, yo creo que no tenemos que adelantar ningún escenario. Es decir, creo que la voluntad del Gobierno de España en esta fase, era la de perpetrase con todas las garantías, con todos los instrumentos para poder abordar la negociación futura, que va a ser la más compleja. Si esto ha sido difícil, lo que viene va a ser aún más difícil. Y, por tanto, creo que -no digo solamente para España, digo para el conjunto de la Unión Europea, y para cada uno de los Estados miembros que componemos la Unión Europea-.

Por tanto, nosotros, en relación con Gibraltar, insisto, estamos en una posición de fortaleza que no habíamos tenido nunca. Que reconoce la Unión Europea el posicionamiento que siempre había tenido España para con Gibraltar, y, sobre todo, que lo que reconoce el propio Reino Unido, en una carta donde dice que, efectivamente, la visión que tiene el Consejo y la Comisión sobre ese artículo 184 del Acuerdo de Retirada es la acertada.

A partir de ahí, mire, no es una cuestión, aunque ya con eso sería suficiente, la cuestión de Gibraltar emocional, de identidad nacional que, lógicamente, nosotros queremos resolver. España lleva durante muchos años clamando ante Naciones Unidas el que el tema de una colonia como Gibraltar debe ser resuelto conforme a Derecho Internacional. Bien, es una cuestión, también, de prosperidad en el Campo de Gibraltar.

El Gobierno de España, hace cosa de tres semanas, aprobó un plan para el desarrollo y el impulso económico de una zona muy deprimida de nuestro país como es el Campo de Gibraltar, con mil millones de euros. Junto a eso, lo que queremos es resolver la cuestión de Gibraltar para que el desarrollo económico sea equitativo en el conjunto del Campo de Gibraltar. No se concentre solamente y, como consecuencia de sus especificidades, en el Peñón de Gibraltar a costa de que el resto del Campo de Gibraltar no se desarrolle.

Por tanto, vamos a tener que hablar con el Reino Unido de muchas cosas, pero vamos a hablar nosotros, España. Y esto lo reconoce la Comisión, lo reconoce el Consejo, lo reconoce el Reino Unido y creo que esto es lo que nos da la garantía suficiente para que hoy podamos haber acordado o ratificado, mejor dicho, el Acuerdo de Retirada, y, también la Declaración Política futura.

P.- Gracias, presidente, Pablo Suanzes, de "El Mundo". Ha dicho, en referencia a estas declaraciones, que supone un gran paso, sin precedentes, incluso, ha dicho, que es más que las directrices que se habían aprobado el año pasado. Sin embargo, este texto, esta Declaración, como dice usted, es política, no aparece en el Acuerdo de salida, no aparece en la Declaración Política, no aparece, si quiera, en las Conclusiones del Consejo, que sí estaban las directrices, entonces. Esto es un anejo a las Actas del Consejo; el valor político, incluso el valor jurídico de esta Declaración no es todo lo potente que se podría hacer. Hay un mensaje político, es indiscutible, pero ha sido rebajado. Y hay algunas delegaciones que apuntan a que esto, en realidad, es únicamente una cuestión política. Hay un cambio político, pero, ¿en el caso de que surjan disputas en el futuro como Reino Unido, qué garantía hay para que España no vaya a tener problemas?

Presidente.- Toda. Tenemos toda la base jurídica. Le pregunto de otra manera, en 2017, cuando el Gobierno de Mariano Rajoy impulsa en una Declaración del Consejo sobre orientaciones del Consejo en cuanto a la negociación, en el año 2017, ¿eso tiene sólo valides política y no jurídica? Mire, al final, hemos venido operando, en lo que representa Gibraltar con aquello que se pactó en el año 2017, y ahora, le añadimos algo más. Le añadimos, lo que hemos llamado un triple blindaje.

En primer lugar, porque en el Acuerdo de Retirada lo que se hace es clarificar y fijar la interpretación jurídica de lo que representa el Artículo 184, y eso, no solamente lo hace el Consejo, sino que, además, lo hace la Comisión, que es quien negocia y quien, además, garantiza el cumplimiento de los Tratados de la Unión. Y lo hace, además, bajo la aproximación que ha tenido España, ya no digo el Gobierno de España, sino el Estado español respecto al conflicto de Gibraltar. Por tanto, yo creo que no hay debate. El debate es que hay una clarificación, hay una fijación de, digamos, el significado jurídico y político de ese famoso Artículo 184. De verdad.

En relación a la salida del Reino Unido, perdemos todos, sobre todo quien pierde el Reino Unido. Pero en relación con Gibraltar, España, gana. Y gana Europa.


P.- Sí, presidente, Jaume Masdeu de "La Vanguardia", quisiera ir a uno de los momentos críticos de esta negociación, cuando se introdujo el polémico Artículo 184, por sorpresa, con alevosía y nocturnidad, según su Secretario de Estado, quisiera saber si usted lo interpreta como un error de cálculo del equipo Barnier, o bien se sintió en ese momento traicionado?

Presidente.- Yo creo que el Gobierno de España, al menos, en esta experiencia que llevamos de cinco meses, y, además, le puedo garantizar que es algo compartido entre el Consejo, es reconocido por posicionamientos constructivos, por ser un Gobierno dialogante, por ser un Gobierno que propone soluciones, y que no crea problemas innecesarios. Por tanto, esa es la premisa.

En segundo lugar, yo, incluso dije que era un Acuerdo razonable. Pero, como siempre, en este tipo de documentos tan complejos, con tantas aproximaciones, que toca tantas historias, y tantas cuestiones de intereses, económicos, comerciales, de derechos, libertades, y hasta, incluso, cuestiones de identidad, no solamente Gibraltar, ahí está Irlanda o incluso, Chipre. Pues hay que reconocer que el diablo está en los detalles. Y cuando se alertó, por parte de la Abogacía del Estado, después de un examen riguroso y minucioso de las dudas que generaba el Artículo 184 y su conexión con el Artículo 3 de ese Acuerdo, pues, evidentemente, nos pusimos a trabajar, y el primero, pues el Departamento de Asuntos Exteriores.

Y, luego, efectivamente, pues, tenemos que, como dijo en su tuit ayer Juncker, dijo: "Solidaridad, determinación y diálogo, es así como se construye la Unión Europea". España ha demostrado solidaridad durante todo este proceso, apoyando, por ejemplo, a Irlanda, o apoyando las demandas de Chipre, o apoyando, también demandas sectoriales que tenían otros países. Determinación, porque en el mismo momento en el que nosotros vemos que corre riesgo la posición de España sobre un asunto tan sensible como es el de Gibraltar, nosotros decimos hasta aquí, esto se tiene que ver revisado, se tiene que redefinir, se tiene que fijar una posición jurídica y política clara por parte de la Comisión y el Consejo y avalada por el Reino Unido. Y eso es lo que hemos logrado. Y, luego, diálogo. Y, bueno, diálogo, pues cuando uno está en la negociación, pues, lógicamente, tenemos que ser determinados, ser firmes, y, luego ya, cuando llega el Acuerdo, pues, reconocer el buen hacer del equipo negociador de la Comisión Europea.

Pero, insisto, todo es un proceso. Y hay que mirarlo cuando se llega al final. Yo creo que bien está, lo que bien acaba.

P.- Jacobo de Regoyos, Onda Cero. Me gustaría volver a sacar el tema de la soberanía. A mi compañera de "El País" le ha respondido que no tenemos que adelantar escenarios, pero yo le escuche a usted hablar ayer de cosoberanía, luego usted lo ha adelantado. Volviendo a sus declaraciones de ayer, ¿para cuándo va a hablar usted de cosoberanía, puesto que usted mismo lo ha mencionado? Gracias.

Presidente.- Si es que nosotros vamos a hablar de todo. Vamos a hablar de todo. Por eso he dicho antes en la comparecencia que ahora empieza el momento más complejo y difícil. Pero, insisto, no solamente en la cuestión de Gibraltar que, sin duda alguna, es importante, pero en otros muchos temas que tienen que ver con cuál va a ser la relación del Reino Unido con la Unión Europea. Y, por tanto, insisto, está bien que nos centremos en Gibraltar, que es algo que apetece a los medios de comunicación, y que nosotros hemos sido determinados, firmes -ahí está el posicionamiento- pero hay otras muchas cosas.

Tenemos a 300.000 españoles viviendo en el Reino Unido, a más de 200.000 viviendo en España, británicos. Hay múltiples intereses; en el transporte aéreo, en el sector de la industria, en la pesca, donde España ha dado un do de pecho y ha defendido la posición de los sectores. Y lo ha hecho de forma solidaria, determinada y con diálogo. Eso es lo más importante.

Por supuesto, que nosotros vamos a hablar de todo. ¿Por qué se cree que para nosotros era fundamental estar bien pertrechados? Y ahora mismo, España cuenta con muchas más garantías. Estamos en una posición de fortaleza, como no hemos estado nunca en estas décadas de pertenencia a la Unión Europea, para poder negociar la cuestión de Gibraltar con el Reino Unido. Entre otras cosas, porque hay que agradecer que en este último impulso, gracias a la capacidad negociadora del equipo de diplomáticos, abogados del Estado, del equipo político del Ministerio de Asuntos Exteriores, pero también a la generosidad de la Comisión Europea y del Consejo que han entendido y que han empatizado con nuestra causa, han asumido perfectamente el discurso político y el enfoque político que tiene España respecto a la cuestión de Gibraltar.

Incido mucho en la cuestión de los servicios diplomáticos, de los servicios de la Abogacía del Estado, porque el Gobierno de España esta cuestión de Gibraltar la ha tomado siempre con un enorme sentido de Estado.

Nosotros hemos llegado al Gobierno en el mes de junio, y teníamos que recorrer los últimos metros en una negociación que venía de atrás. Lo hicimos con el mismo equipo negociador. Lo hemos hecho bajo las mismas reglas, bajo el mismo marco, y con los mismos objetivos. Tanto es así, y esto creo que es muy importante, también subrayarlo, que hemos llegado a un Acuerdo con el Reino Unido, respecto a Gibraltar, con un Protocolo y con cuatro Memorándums que garantizan los derechos de circulación, la relación de fiscalidad, cuestiones como el tabaco, etcétera, etc., que han sido resueltos por este Gobierno. Por este Gobierno porque ha actuado con sentido de Estado.

Es decir, que nosotros no hemos hecho nada más que recoger el testigo de la anterior administración y culminarlo. Y creo que también esto es bueno para todos los vecinos y vecinas del Campo de Gibraltar que trabajan en el Peñón de Gibraltar. Por lo tanto, efectivamente, estos Protocolos y estos Memorándums van a tener rigor, vigencia hasta que acaba el periodo de transición, durante este periodo de transición, durante estos dos años, lo que tenemos que hablar es, efectivamente, con el Reino Unido de todo. Por eso, queríamos estar bien garantizados en que los instrumentos y el reconocimiento de la Unión Europea iba a ser total, y es total por parte de la Comisión y del Consejo.

P.- Bueno, presidente, ahora que España tiene esta posición reforzada. ¿Exactamente cómo la va a utilizar?, para explicárselo un poco mejor a los ciudadanos ¿para qué nos vale esta llave que tenemos? Es decir, ¿la llave va a servir para desbloquear ciertos acuerdos o para garantizar ciertas demandas respecto a Gibraltar, entiendo? No sé si puede ser más específico. No sólo de cosoberanía, sino quizás sobre el estatus que va a tener a partir de ahora Gibraltar. Y sólo por aclarar, ¿queda mucho tiempo para que se firme la Declaración futura, para que veamos la relación futura que va a tener España con el Reino Unido, en esos futuros documentos que se firmarán ¿le gustaría a España que estuvieran incluido dentro de un texto legal, bueno, con más cuerpo legal que la Declaración política que tiene hoy? ¿Esa referencia sobre Gibraltar va a intentar pelear España por este cambio en unos textos más que sean Tratados de la Unión? Gracias.

Presidente.- Bueno, vamos a ver una cosa porque creo que, en fin, esto para que quede al menos grabado. No somos el único país que ha puesto objeciones al Acuerdo de Retirada, pero somos el único país que ha conseguido una Declaración del Consejo y de la Comisión avalada por el Reino Unido. Los otros se han conformado con una Declaración sólo del Consejo. Por tanto, estamos hablando de un logro político del Estado muy significativo que nos sitúa en una posición de fortaleza muy importante, respecto a un tema central, no solamente para el desarrollo económico y equilibrado del Campo de Gibraltar, sino también para el conjunto del país. Punto uno. Punto dos. Nosotros, insisto, vamos a hablar de todo. Y, punto tres. Vamos a empezar a hacer el camino. No desvelemos todo lo que vayamos a hacer.

Desde luego, el planteamiento que tiene el Gobierno de España es el de una vez por todas, resolver un conflicto que lleva más de 300 años existiendo. Y esa es nuestra voluntad.

P.- Sí, gracias, buenas tardes. Yo quisiera saber si ha tenido oportunidad hoy de hablar del Acuerdo con la primera ministra británica. Y, por otra parte, quería saber su opinión respecto a las valoraciones que hizo ayer el líder del Partido Popular en relación con este Acuerdo hablando de fracaso, considerando que no tienen un valor jurídico, y diciendo que se ha perdido una oportunidad para avanzar, precisamente, en la cosoberanía del Peñón. Gracias.

Presidente.- Bueno, respecto a la primera de las preguntas, sí, por supuesto, he hablado con la señora May, sin duda alguna y le expresado tres cosas que me parecen muy importantes. La primera, que le deseo que el Parlamento británico ratifique por mayoría este Acuerdo, porque creo que es el mejor Acuerdo al que se puede llegar. No hay otro. Este es el Acuerdo.

En segundo lugar, le he traslado la voluntad del Gobierno de España y, además, creo que del pueblo español, que es un pueblo hermano al pueblo británico, de tener las mejores relaciones diplomáticas, económicas, sociales, culturales.

Y, en tercer lugar, lo que le he trasladado es nuestra voluntad también de superar y de llegar a acuerdos con ellos, en las discrepancias. No solamente de estrechar nuestros lazos económicos, comerciales y demás, sino también nuestra voluntad noble, cierta, verdadera de poder llegar a un acuerdo que resuelva este conflicto.

Y respecto a su segunda pregunta, yo lo único que le diría es que se lea la prensa británica y saque sus conclusiones.

Gracias.

(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)