V Foro de Innovación Turística

Intervención del presidente del Gobierno en la inauguración del V Foro de Innovación Turística

22.1.2019

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IFEMA

Querida ministra, secretario general de la Organización Mundial de Turismo, presidente del Grupo Hotusa, presidente de IFEMA. Buenos días a todos y a todas.

Quiero, en primer lugar, agradecer a Hotusa la invitación para abrir este Foro. Un encuentro en el que tanto su directora de marketing como también el presidente han hablado de un concepto clave que a mí me gustaría también subrayar y resaltar en esta intervención, que es el de la innovación.

Innovar es lo opuesto a acomodarse. Es lo contrario a relajarse, en un escenario favorable. Es anteponer la idea de que por buena que sea la coyuntura concreta, y es evidente que el sector turístico vive una coyuntura muy positiva en España, hay que mantener la tensión para adaptarse a cualquier escenario posible.

Y, hoy, quiero reconocerles esa actitud, porque en ningún sector como este, como el sector turístico, es más necesario adaptarse a los hábitos de un consumidor cada día más exigente.

El turismo no es un ámbito más de nuestra economía, se ha dicho antes por los intervinientes. Tiene un papel clave en la modernización material, y cultural de nuestro país. El sector turístico es, en definitiva, la primera impresión de un país para quienes lo visitan. El marco desde el que proyectamos nuestra forma de ser y, también, de hacer las cosas.

Y los datos avalan una verdad incontestable, y es que quien conoce España no la olvida. Y el sector turístico no es ajeno a ello.

Por eso, estamos ante una auténtica política de Estado, como ha dicho antes el presidente del Grupo Hotusa, que debe estar entre las principales prioridades de todo Gobierno, y, sin duda alguna, está en nuestro Gobierno.

El peso de este sector en nuestra economía así lo exige. Es el que más riqueza ha generado en los últimos años, el que ha seguido creando empleo cuando otros sectores no podían. El que mejor soportó los efectos de la crisis económica.

Este sector ha sido un auténtico salvavidas; un auténtico salvavidas, para cientos de miles de españoles y españolas en los momentos más duros de la crisis económica. Por tanto, es de justicia que se sepa y que se reconozca.

Y yo, como presidente del Gobierno, así lo hago. Hoy quiero expresar, sinceramente, mi gratitud por ese hecho. Por el hecho del compromiso del sector turístico con la sociedad cuando se más se necesitaba de eso, de compromiso social.

Gracias, en definitiva, en términos coloquiales, por tirar del carro en momentos de dificultad extrema como los que hemos vivido tan recientemente.

Apenas tres cifras sirven para dibujar el papel del turismo en nuestra economía: el 11,7% del Producto Interior Bruto, el 12,2% del total de la afiliación a la Seguridad Social, y 2,7 millones de hombres y mujeres, de familias, en definitiva, que dependen del turismo.

Son datos que, si justifican algo, es nuestra posición de liderazgo en este sector. Según el Foro Económico Mundial, que se va a celebrar esta semana en Davos, somos el país más competitivo del mundo en el sector turístico. Somos referentes en gestión, pero también lo somos siendo pioneros en el desarrollo de la red de destinos turísticos inteligentes. Un modelo que ha atraído el interés de organismos internacionales que promueven la excelencia, también, en otros países.

Pero lo cierto es, señoras y señores, que las estadísticas, por sí solas, no alcanzan a reflejar la contribución del turismo al progreso de nuestro país.

El sector turístico es una herramienta de cohesión, de cohesión social -antes me he referido a ella-, pero también, de cohesión territorial, a la cual ha hecho referencia antes Amancio en su intervención. Es fuente de empleo, lógicamente, pero también de fijación de población. Y me parece que este es uno de los desafíos que tenemos como sociedad y como país.

También ayuda a un activo inmaterial que me gustaría subrayar de incalculable valor, y que me gustaría destacar nuevamente, que es la contribución del sector turístico a fortalecer la imagen global de nuestro país, la imagen global de España.

En 2018, nada más y nada menos, nos visitaron 82,6 millones de turistas internacionales. Es una cifra récord sobre el récord ya marcado en el año 2017. Y lo que es aún más importante, con un aumento del gasto, de los turistas, de quienes nos visitan.

Son datos aún más valiosos en un contexto de recuperación de algunos de nuestros principales competidores como es Túnez, como es Turquía, afectados hasta ahora, por la inestabilidad política.

Es decir, en un entorno cada vez más competitivo, nuestra posición ya no puede atribuirse única y exclusivamente a debilidades ajenas, sino a las fortalezas propias. Y quiero subrayar este dato. España lidera no por el infortunio, no por el demerito de otros, sino por el saber hacer de los nuestros.

Los datos son especialmente alentadores, en lo relativo a las cifras de los últimos meses del año, datos de temporada baja. Es decir, estamos venciendo los límites de la estacionalidad, que siempre ha sido uno de nuestros principales males que me habéis dicho cuando hemos tenido ocasión de reunirnos. Proyectamos todo lo bueno que somos y tenemos, más allá de lo que los modelos y visiones tradicionales decían del sector turístico español. También aquí, como en muchas otras esferas de la vida, el catastrofismo y las profecías autocumplidas de algunos tendrán que esperar, en buena medida, gracias a quienes dais la cara en este sector y miráis al futuro con optimismo.

A los poderes públicos, como bien ha dicho antes el presidente del Grupo Hotusa, nos toca arrimar el hombro. Nos toca ayudar al sector a que identifique las iniciativas y las acciones prioritarias. Nos toca colaborar en el crecimiento y en la sostenibilidad del sector turístico, con prudencia y con realismo, pero también con una vocación de enorme ambición. Esa es la filosofía, por ejemplo, también del proyecto de Presupuestos: ayudar a la economía en un momento en el que, pese al contexto de moderación global que estamos viviendo, España mantiene una expansión de su crecimiento económico, sólido, y siga liderando el crecimiento económico del conjunto de la Unión Europea.

Esos Presupuestos están cargados de valores sociales, sí. Pero también están cargados de enorme sentido común. Demuestran que reforzar la cohesión social y blindar el Estado de bienestar son objetivos perfectamente compatibles con el crecimiento y la creación de empleo. Es más, que si algo tenemos que extraer de los 10 años de crisis económica y financiera es que ambas cosas, la cohesión social y el crecimiento económico sostenible van de la mano.
Y hacerlo cumpliendo con los objetivos del Pacto de Estabilidad y Crecimiento de Bruselas, en definitiva, los objetivos de déficit público y de reducción de la deuda pública sirven, no solo para honrar con la palabra dada, que es fundamental en un contexto internacional cambiante, sino también optar por algo importante en nuestro país, como es la estabilidad, la certidumbre, y la responsabilidad. Pero como bien antes comentaba Amancio, apostar por la inversión en formación es bueno para sectores como el sector turístico. Reforzar la inversión en infraestructuras, tras años de deterioro, me parece que es clave para el turismo. Recuperar la inversión en seguridad tras años de reducción de efectivos, es determinante para sectores como el nuestro.

En todos estos ámbitos, además de nuestro atractivo cultural paisajístico y climático, también reside la fortaleza de España. Es un activo invisible, que muchas veces damos por sentado, pero que tiene un incalculable valor para la imagen de nuestro país, es el valor intangible de lo público, el que percibe un viajero cuando pasea por el centro histórico de una ciudad y siente la presencia cercana de una pareja de la Policía Local, de la Guardia Civil o de la Policía Nacional. Cuando tiene una incidencia y encuentra a un empleado público dispuesto a ayudar. Cuando sufre un pequeño contratiempo, y recibe la atención de un sistema sanitario excelente, ejemplar en el mundo.

Recuperar, en consecuencia, la inversión en fomento. Recuperar la inversión en formación, en sanidad, en seguridad también es invertir en turismo.

Lo que hace el Gobierno con este Presupuesto es fortalecer ese intangible y ponerlo al servicio de quienes de verdad crean empleo, que son los emprendedores que innovan y buscan la excelencia. De todos ustedes. De quienes ponen su inconformismo y su pasión por crecer al servicio del conjunto de la sociedad generando empleo de calidad.

Hoy les anuncio que desde el Gobierno hemos elaborado un documento con las directrices generales de la Estrategia de turismo sostenible de España 2030. Una Estrategia basada en cinco ejes. El primero, la gobernanza colaborativa. El segundo, el crecimiento sostenible. El tercero, la transformación competitiva y la rentabilidad del sistema. El cuarto, las personas, las empresas, el territorio. Y, por último, producto e inteligencia turística.

Se trata, en definitiva, de una hoja de ruta que ya estamos enriqueciendo con las aportaciones de las comunidades autónomas, del sector y del resto de agentes sociales y económicos implicados. Se están organizando y celebrando diferentes grupos de investigación para obtener la mejor información de expertos y actores claves en esta tarea. Nadie mejor que ustedes sabe lo que conviene al sector.

Por ello, no sólo pido su implicación, como bien antes ha comentado el presidente del Grupo Hotusa, sabiendo que el Gobierno, por supuesto, se va a implicar con ustedes. Pido, también, su ambición por innovar para anticipar escenarios. Para seguir como hasta ahora, un paso por delante de los principales competidores que tenemos. Pero también, para consolidar, para consolidar el nuevo modelo turístico que queremos para España y que tiene como eje central, como eje vector, la sostenibilidad.

Debemos anticiparnos a potenciales desafíos, como la saturación puntual, que ha dado lugar a casos de turismofobia, como bien se ha comentado antes. La pérdida de identidad de los destinos o la contaminación ambiental.
Y, en este punto quiero reivindicar la posición de la España interior; de la España interior como un auténtico activo de primer nivel en términos turísticos. Es una España que se enfrenta al vacío, a la amenaza de la despoblación, y que, al mismo tiempo, está llena de encantos y de atractivos. Así que, pido su implicación para ayudar a quienes nos visitan a conocer esa otra España llena de tesoros. También aquí creo que tenemos un gran reto por delante.

En economía, bien lo saben, réditos pasados no garantizan retornos futuros. Y en este sector se entiende mejor que en ningún otro, que la innovación y la adaptación a las nuevas demandas, es una obligación para sustituir en un entorno -subsistir, mejor dicho-, en un entorno tan competitivo.

El turismo es un campo estratégico para España que requiere de una atención de políticas y de enfoques transversales, horizontales a la acción del Gobierno. En ese sentido, recojo el guante de Amancio.

He hecho mención a la necesidad de coordinar, de sumar recursos que desde distintos ámbitos tienen como resultado la generación de valor añadido. Por eso, también les anuncio que vamos a modificar y también vamos a reforzar la estructura de la Comisión Interministerial de Turismo, que no se reúne desde el año 2012. Y que convocaremos en breve.

Mejorar también la coordinación para ser más eficaces en el ámbito gubernamental. Necesitamos, por ejemplo, contar como bien ha dicho antes Amancio con el enfoque del Ministerio de Asuntos Exteriores, especialmente, cuando uno de nuestros principales mercados es el británico. Y ahí está a las puertas el Brexit. Se enfrenta a esa incertidumbre y lo que tengo también que trasladarles es, lógicamente, la preparación de los planes de contingencia, por parte del Gobierno de España, desde el minuto uno que entramos en el Gobierno.

Pero también necesitamos tener en cuenta la perspectiva del Ministerio de Fomento para mantener las conexiones aéreas, con nuestros principales mercados emisores. O también, el punto de vista del Ministerio del Interior para garantizar la seguridad de nuestros visitantes.

Tanto el Plan Estratégico como la Reforma de la Comisión Interministerial son la mejor prueba del compromiso del Gobierno de España con su sector. Pero sobre todo, con el futuro del sector, con la necesidad de mantener una visión dinámica, y nunca estática, de un ámbito clave para nuestra economía.

Hoy quiero poner de relieve su contribución, la de todos los que trabajan en este sector para contar al mundo cómo es España. Su trabajo es parte del paisaje emocional de nuestro país. No sólo para nosotros, sino para millones de visitantes que lo hacen cada año.

Todos ustedes son parte fundamental de un relato de país, que se cuenta a sí mismo, ante todo el mundo, como una sociedad abierta, plural, tolerante y optimista.

Gracias, en definitiva, por contribuir a forjar la imagen de esa España capaz de sobreponerse a la adversidad. De levantarse e innovar. Y que ahora afronta con decisión el reto de la sostenibilidad en un sector como este, que volverá a ser, sin duda alguna, de nuevo la vanguardia de este desafío, como en tantas otras ocasiones.

Un escritor ya desaparecido decía, Roberto Bolaño, que "cada 100 metros el mundo cambia". También, España, que es un país diverso y plural, capaz de proyectarse al mundo en diferentes idiomas y con diferentes culturas.

Todos ustedes, con su trabajo, hacen posible que España se conozca mejor a sí misma, para que después se la conozca mejor en el mundo.

Así que, les animo a seguir liderando, pero sobre todo, les animo a innovar en la senda de lo que pretende este Foro, a buscar y a alcanzar la excelencia, por la que el Grupo Hotusa ya fue premiado y reconocido, como el mejor camino a seguir para consolidar el liderazgo de nuestro país en este territorio del sector turístico.

El Gobierno de España, no les quepa duda, estará a su lado.

Muchas gracias.

(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)