Rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros

Intervención del ministro de Hacienda y Administraciones públicas, Cristóbal Montoro

30.3.2012

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Sr. Montoro.- Es el primer día de los Presupuestos Generales del Estado para el año 2012. El Consejo de Ministros ha aprobado ese Presupuesto, el próximo martes tendré ocasión de llevarlo a las Cortes Generales, al Congreso de los Diputados, y, por tanto, una vez se haya materializado esa entrada en el Congreso de los Diputados, volveremos a convocar rueda de prensa con los medios de comunicación para entrar ya en mucha más materia y más contenido, puesto que ya en ese terreno, en ese territorio, las Cortes ya tendrán conocimiento de todo el contenido de los Presupuestos Generales del Estado.

Son unos Presupuestos que en esta ocasión también van flanqueados por un Real Decreto Ley sobre medidas tributarias. Yo les voy a presentar de manera conjunta los dos ámbitos, entendiendo, como ha dicho ya la Vicepresidenta, que estamos ante la adopción de medidas de carácter extraordinario, porque la situación es extraordinaria. Estamos ante una situación crítica a la que tenemos que responder con los Presupuestos más austeros de nuestra democracia y, en concreto, también con la adopción de medidas tributarias que recaben nuevos ingresos, nueva financiación, para garantizar los servicios públicos.

Estamos, en definitiva, ante un ajuste, un ajuste duro, un ajuste muy duro; un ajuste que significa renunciar a muchos programas de gasto, pero un ajuste que es la forma de equilibrar cuanto antes nuestros Presupuestos, de hacerlo en coordinación con las Comunidades Autónomas y con las Corporaciones Locales, y, de esa manera, atajar la crisis económica y evitar la destrucción de puestos de trabajo que está teniendo lugar en España desde hace demasiado tiempo y que también es consecuencia de la recesión económica que estamos viviendo.

Por eso hacemos un Presupuesto que es, en definitiva, austero, como decía, fuertemente austero, pero que es la forma de acometer esa reducción cuanto antes del déficit público; condición necesaria para financiar correctamente la economía, financiar el crecimiento económico y volver a la creación de empleo.

Vamos a ir relativamente rápidos, sin menoscabo de que, ya les digo, el martes tendrán ocasión de tener el encuentro mucho más pormenorizado. En primer lugar, estamos interpretando lo que es el objetivo de déficit, que ahora se lo precisaré; pero contando con la presencia de las partidas comprometidas de gasto, que son los intereses, la financiación a las Administraciones territoriales, las prestaciones no contributivas de la Seguridad Social y las pensiones de las clases pasivas. En definitiva, hemos de entenderlo como constantes, como ineludibles, y, a partir de ello, vemos que el total de reducción del déficit, más las partidas comprometidas de gasto, nos llevan a que tengamos que afrontar la corrección de un déficit del orden del 2,5 por 100 del Producto Interior Bruto y nos llevan, en definitiva, a hacer el mayor esfuerzo de consolidación fiscal de la democracia, en concreto 27.300 millones de euros, a los que se llega precisamente a través del incremento de ingresos del Estado, como estamos programando, y de los ajustes del Estado en términos correspondientes.

En definitiva, estamos en un proceso de consolidación fiscal y reformas estructurales; en un proceso que, además, se interacciona: no puede verse uno sin otro en todos los ámbitos. Pero, en definitiva, estamos en un proceso que realmente lleva adelante las reformas estructurales del sector público en todos los ámbitos, incluido el energético que acaba de explicar el ministro: laboral, financiero… En definitiva, el ajuste presupuestario hay que encuadrarlo en un reordenamiento, en una redefinición, del ámbito del sector público en nuestro país.

A ese respecto también, junto al Presupuesto, y ahora hablaremos de la profunda reducción de los gastos de los Ministerios, figuran las medidas excepcionales de carácter tributario que adoptamos para aumentar la recaudación del Estado en un momento crítico y el plan de lucha contra el fraude, que es fundamental, y que configuran ese planteamiento, en definitiva, de la política en este caso de ordenamiento de las finanzas públicas. Se trata de un plan contra el fraude que traeremos --no está hoy incorporado, lo traeremos-- el próximo Consejo de Ministros y donde limitaremos el uso de incentivo a una cantidad concreta relativa a las operaciones que pueden abordarse en efectivo, junto a otras medidas realmente importantes que dejamos. Pero ya advierto, por tanto, en el frontispicio, que lo traeremos en el primer Consejo de Ministros, en este caso después de Semana Santa, para que también esté en vigor cuanto antes y vaya en paralelo al desarrollo del Presupuesto.

Es conocida la exigencia que supone para nuestro país el cumplimiento del Programa de Estabilidad. En su actualización es conocido que la tarea, el desafío, es la reducción desde el 8,5 por 100 de déficit público al 5,3 por 100 para el conjunto de las Administraciones Publicas, que significa que para la Administración Central, que es la que presentamos en estos Presupuestos, que en 2012 tenemos que alcanzar ese objetivo del 3,5 por 100.

Todas las medidas, tanto de gasto como de ingresos públicos, lo que pretenden es garantizar la consecución del déficit público y hacer fiable ese objetivo, que es alcanzar el 3,5 por 100. Ésa es una condición ineludible para el Gobierno y es lo que da sentido al conjunto de las medidas, tanto de ingreso, como de gasto público. Tenemos que hacer alcanzable, conseguible, ese objetivo, irrenunciable en todo punto y, por tanto, en la propia ejecución de Presupuestos seguiremos al milímetro esa ejecución tomando decisiones para que ése sea realmente el objetivo alcanzable en términos de Administración General del Estado y seremos igual de exigentes, como nos marcará la nueva Ley de Estabilidad Presupuestaria, para que las otras Administraciones Públicas cumplan también con ese objetivo.

De manera que España será fiable en 2012 por el cumplimiento del total del 5,3 por 100 como máximo de déficit público sobre su Producto Interior Bruto. Eso es lo que nos hará un país fiable y un país que vea pronto la recuperación económica.

Las claves del esfuerzo las vamos, en definitiva, las vamos a ir analizando; ya también las ha avanzado la vicepresidenta. Ya hemos calificado el Presupuesto como el más austero de la democracia y el que contiene mayor, en definitiva, consolidación fiscal, reducción de las Administraciones Públicas en 3,2 puntos porcentuales de PIB; reducción de la Administración Central del Estado en 17.800 millones de euros en 2012 y caída de gasto del 16,9 por 100 del gasto correspondiente a los Ministerios, que es el gasto que tiene en su mano, en su decisión, el Gobierno.

También las medidas de carácter tributario y de carácter excepcional, que, junto a la subida que ya se ha practicado, que hemos impulsado, del IRPF, promoverían unos ingresos tributarios de 12.314 millones de euros.

Vayamos al gasto, donde lo que vemos es que, insistiendo en que mejoramos las pensiones, mantenemos el sueldo de los funcionarios, mantenemos, por supuesto, las transferencias a las Administraciones territoriales, que significa financiación de los servicios públicos --educación, sanidad y protección social--, mantenemos becas, mantenemos desempleo y mantenemos seguridad, en definitiva lleva adelante o promueve la reducción de ese 16,9 por 100 que, en millones de euros, significa que el gasto total de los Ministerios queda en 65.803 millones de euros.

En el detalle de los Ministerios correspondiente a todas las partidas figura el detalle del recorte de los Ministerios al que nos venimos refiriendo, el 16,9 por 100, con los diferentes títulos de los Ministerios para ver dónde se ubica ese ajuste, esa reducción de gasto público, con las otras partidas que son, como antes les decía: órganos constitucionales, clases pasivas, intereses, entes territoriales, fondos de compensación interterritorial, aportación a la Unión Europea y Fondo de Contingencia. Las sacamos de ahí, para que se vea con toda claridad y con toda nitidez. Por tanto, queda expresada esa reducción.

El título del Ministerio es expresivo, pero lo importante son las partidas correspondientes al Ministerio; si me permite, digamos, tiene más interés.

También facilitamos ya la clasificación económica, cómo queda ese Presupuesto, resumen por capítulos, con las exclusiones de financiación de Administraciones territoriales, obligaciones de ejercicios anteriores y la aportación de España al Mecanismo de Estabilización de la Unión Europea. Lo podemos repasar en un momento, pero el gasto de personal, que es uno de los grandes gastos del Estado, lo hemos congelado; pero también lo que hacemos, como saben, es extender la jornada laboral a todas las Administraciones, como nos habíamos comprometido, y, por supuesto, también congelar el aumento de plantilla, que es una medida importante, excepto en los servicios públicos esenciales, que quedan limitados al 10 por 100 en la tasa de reposición, incluida la seguridad. Por tanto, eso hace también que haya una contención efectiva en materia de personal. El personal activo decae y cae, por tanto, menos 2,6 por 100, y son las clases pasivas las que explican que el total aumente.

Los gastos financieros son ineludibles, son la consecuencia de la carga del servicio de la deuda. Lo que hay que hacer es detener el aumento de la deuda cuanto antes y, por eso, hay que reducir el déficit público.

En transferencias corrientes, que luego se lo explicaré, también hay una caída significativa. En operaciones corrientes, el Fondo de Contingencia, las inversiones reales caen un 19,6 por 100. En ese sentido, no pretendemos agudizar más la recesión recortando más la inversión y, sin embargo, sí hacemos mucho más la reducción de transferencias de capital, que llegan a descender casi a la mitad, el 46,4 por 100. Son las aportaciones en forma de capital que hace el Estado a los entes públicos y ahora algunas de ellas las iremos destacando.

En total, el presupuesto no financiero, -6,7 por 100; presupuesto no financiero, más Capítulo VIII, -9,6 por 100. Es importante, porque también, no solamente nos conformamos con el gasto no financiero, sino que vamos a la reducción del gasto financiero también. Entendemos que es la financiación del Estado en su conjunto lo que tenemos que abordar.

¿Cuáles son las principales reducciones de las partidas, que se las vamos a exponer, sin menoscabo de que tendrán todo el detalle el próximo martes? Se las voy relatando: reducción de 594 millones de euros en transferencias a la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo; reducción de 125 millones en el Fondo de Agua y de 670 millones en FONPRODE; reducción de 351 millones en inversiones de Defensa; en vivienda, reducción de entre 122 millones de ayudas para acceso a la vivienda; en infraestructuras, reducción global de 144 millones de euros en inversiones, rebaja de 360 millones para autopistas de primera generación y descenso de las aportaciones a ADIF y SEITT,S.A, de 287 y 427 millones de euros, respectivamente; reducción de 12 millones para convenios en carreteras de competencias autonómicas; en subvenciones al transporte, reducción de 65 millones de la subvención a residentes no peninsulares; reducción de las transferencias en Educación, excluidas becas, en 530 millones; en empleo, eliminación de 67 millones de la dotación al Fondo de Integración de Inmigrantes y reducción en 1.557 millones de euros de las políticas activas de empleo; en Hacienda, reducción de 254 millones para adquisición de acción y participaciones en Sociedades Estatales, y reducción de 51 millones a empresas de promoción económica.

Ahí tienen el relato, que ven que es un relato bastante completo, de lo que significan las principales reducciones, con independencia de que después ya las podamos ir viendo también en esos otros términos, que también se los vamos a facilitar. Se las he destacado, pero se las vamos a facilitar. Por Ministerios verán que realmente estamos ante reducciones muy importantes, más o menos llamativas, en términos de lo que ya les he traducido: en términos de fondos de ayuda al desarrollo; de la Corporación Radiotelevisión Española; de subvenciones a zonas de promoción económica; de activos financieros; dentro de Fomento, además de en el capítulo de inversiones, de ayudas al acceso a la vivienda; en el Ministerio de Educación; en el Servicio Público Estatal de Empleo, que es donde les he relatado también las mayores reducciones en las políticas activas de empleo; o en el Ministerio de Industria, en el Instituto de Reestructuración de la Minería del Carbón, etcétera; en la generación de energía.

En este capítulo del Instituto de Reestructuración de la Minería del Carbón tengo que decirles que el grado de ejecución de las partidas hasta ahora ha sido de un 27 por 100. Esto también tiene bastante de realismo, no sólo de reducción, aunque alguno se quejará, sin duda alguna. No estamos reduciendo, sino que estamos adaptando lo que son fondos que no se aplican en un presupuesto que tiene que ser extremadamente realista también en alguno de ellos.

En agricultura la reducción también afecta a los planes relativos a Comunidades Autónomas. También en materia de Sanidad y Asuntos Sociales, en el nivel convenido para la financiación de la dependencia. En el Ministerio de Economía y Competitividad también hay reducciones que aparecen especificadas, aunque en el caso del CDTI realmente estamos tomando remanente de tesorería, no estamos tocando los programas esenciales del funcionamiento del organismo. No hay duda a ese respecto.

Yo creo que en el capítulo de gasto está suficientemente descrito ese total. Se trata de aplicar un ajuste muy serio, muy severo, como han visto, y un ajuste que realmente trata de ser el menos perjudicial posible para la actividad económica, preservando derechos sociales.

Paso a ingresos. En ingresos, las medidas son para que, en definitiva, la vertiente de ingresos tributarios aporte también a la consolidación. La cuestión esté en el gasto, pero no únicamente en el gasto, y hay que verlo así, y así lo hemos visto desde las primeras decisiones del Gobierno; en concreto, desde el Consejo de Ministros del 30 de diciembre.

Así pues, traemos nuevas medidas tributarias para sostener a la recaudación, que está cayendo en una etapa de recesión económica, y actuamos sobre el Impuesto sobre Sociedades para frenar también la caída de esa recaudación. No aumentamos, en absoluto, el tipo formal de gravamen; nos limitamos a las deducciones y a la reforma del sistema de pagos fraccionados. Pero ahora verán que también tiene incidencia y hay incidencia económica importante.

También actuamos en términos de favorecer, a través de medidas excepcionales, que afloren para la tributación las rentas no declaradas. Ésta es una regularización fiscal que es necesaria, porque es necesario traer más recursos a la Hacienda pública y porque es necesario financiar los servicios públicos de nuestro país. Por tanto, ésta es una medida extraordinaria propia de un momento extraordinario, como les decíamos desde el principio.

Además, seguimos también la propia recomendación de la OCDE que recomienda a los países miembros que, cuando están en esa situación, no duden en utilizar este tipo de medidas de regularizaciones, obviamente, impulsando la lucha contra el fraude, como antes les he anunciado desde el principio, y que abordaremos en el siguiente Consejo de Ministros.

En el ámbito de impuestos especiales, en el impuesto sobre el tabaco y lo que hacemos es un cambio dentro del sistema de tributación.

La idea, en términos cuantitativos, es mejorar la recaudación de una forma extraordinaria, en el sentido de buscar un vehículo extraordinario, porque necesitamos de ello. Aparece, ya desde el primer momento, una información muy clara, muy transparente, de cuáles son nuestras previsiones de evolución de esa recaudación, donde lo que destaca es que estamos ante un proyecto de Presupuestos que, debido a la actuación sobre el IRPF y debido a la actuación sobre el Impuesto sobre Sociedades, lo que trata es de que haya una evolución incrementalista del total de ingresos directos, del ámbito de la imposición directa, mientras que esperamos, desgraciadamente, poco del ámbito de la imposición indirecta, habida cuenta la recesión y el escenario económico en el que nos estamos moviendo, que, como todos ustedes recuerdan, es un escenario de descenso del consumo. Por tanto, poco cabe esperar en términos de aportación, si no es de la lucha contra el fraude, que insistiremos en ella y vamos a ello, como les decía, de manera decidida.

Ése es el total y vemos el detalle completo de cómo impactarían presupuestariamente las diferentes figuras tributarias, algo que, para el realismo que queremos imprimir desde el primer momento a la presentación pública de Presupuestos, nos parece también indispensable. En el Impuesto sobre Sociedades las principales actualizaciones serían: diferimiento de beneficios fiscales, que daría esta cuantía; libertad de amortización, que lo que haríamos sería limitarla en el sentido de impedirla para nuevas operaciones y aplicar un régimen de transición para las antiguas. La libertad de amortización seguiría existiendo para las Pymes, relacionada con ampliación de plantilla. Ésa es la que estaría sin afectar por esta medida.

En gastos financieros, la capacidad de deducción de esos gastos financieros por parte de las sociedades la limitaríamos al 30 por 100 de su resultado contable, con un mínimo de millón de euros en términos de gastos financieros que no estaría sujeto a la norma. En definitiva, establecemos una norma muy parecida al régimen de otros países de nuestro entorno, que tienen un régimen tributario muy similar. En concreto, lo tiene, por ejemplo, un país que es una referencia ineludible en estos momentos para nosotros, como es Alemania.

En pagos fraccionados, cambiamos también el régimen de pagos fraccionados, donde hay un desplazamiento en el pago del impuesto.

Y también acudimos a una fuente en ese gravamen sobre los dividendos de fuente extranjera. Se trata de que, en la repatriación de beneficios por parte de las empresas que los tengan en otros territorios diferentes de España, se puedan acoger a ese gravamen especial de un 8 por 100. De esa manera, lo que podamos es recaudar más para la Hacienda pública en esa cuantía y también sería positivo y fortalecería la propia estructura financiera de las empresas que se acojan a esta regularización.

En lo que se refiere a impuestos directos, estaríamos estableciendo un gravamen especial que, en definitiva, lo que haría es favorecer la regularización de los totales, los saldos, que vengan a España de otros territorios o también afloren desde la propia España, evitando las penalizaciones hoy propias, como hacemos en nuestro país, del régimen ordinario de declaración, de manera que, a cambio de pagar un 10 por 100, el sujeto pasivo quedaría regularizado y quedaría normalizado, integrado en nuestro sistema tributario. Ésta también es una medida que se ha practicado en otros países, como les decía, recomendada por la OCDE, y se ha practicado con éxito tributario en términos de recaudación. Los referentes más cercanos los tenemos en Italia. Lo ha hecho Italia y también lo hicieron el Reino Unido y el propio Estados Unidos, en diferentes versiones.

En impuestos especiales, fundamentalmente en el tabaco, lo que hacemos es actuar sobre el específico y el ad valorem. Lo que hacemos es una redistribución dentro del propio gravamen, de manera que no perjudiquemos tampoco y mantengamos un nivel de competencia entre los oferentes de ese tabaco, y, al mismo tiempo, contribuyamos a reducir el contrabando que formará parte de la lucha contra el fraude en nuestro país. Pero también esperamos que la imposición especial sobre el tabaco aporte, en vez estar en reducción, como ha estado, gracias a ese cambio en nuestra normativa tributaria.

En cuanto a las tasas, lo más importante, y también lo ha descrito la Vicepresidenta, es que la tasa jurisdiccional significaría una aportación significativa.

Éste es el total de ingresos, con lo cual entiendo que hemos llegado al final y que estamos a su disposición para las preguntas, advirtiéndoles que el martes tendrán toda la documentación. Sé que hemos sido especialmente prolijos ya, pero el martes tendrán toda la documentación de Presupuestos y, por tanto, junto a todo el equipo de Hacienda y los secretarios de Estado, podrán también tener acceso a las explicaciones mucho más detalladas, pormenorizadas, de lo que podamos hacer en una rueda de prensa después del Consejo de Ministros.