Rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros

Intervención del ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos

10.7.2015

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Sr. De Guindos.- Yo, muy rápidamente, voy a indicarles lo que ha sido la revisión que ha aprobado hoy el Consejo de Ministros de nuestras proyecciones macroeconómicas, tanto para el año 2015, como para el año 2016, en relación con nuestro Programa de Estabilidad. El Programa de Estabilidad, como saben ustedes, se aprobó a finales de abril y lo remitimos a Bruselas pero, posteriormente, la evolución de los datos ha llevado a que preparemos esta revisión, que es fundamental de cara, tanto a la elaboración de los Presupuestos, como al cálculo del techo de gasto, que después comentará el ministro de Hacienda.

Empezando, en primer lugar, por las hipótesis, lo que se ha modificado desde abril hasta este momento, la modificación fundamental son los tipos de interés a largo plazo. En abril estábamos en un contexto, en unas circunstancias, en las cuales uno de los temores fundamentales que existían en los mercados era la deflación y los tipos de interés a largo plazo estaban extremadamente bajos, anormalmente bajos. Desde entonces, se ha producido una normalización, normalización que, por ejemplo, en el caso del bono alemán a diez años, ha pasado de estar de tipos con rentabilidades próximas a cero a estar en estos momentos con rentabilidades en el entorno del 0,80 por 100, y que también se ha reflejado en todas las curvas de tipos de interés de los diferentes países.

Por eso, lo que hacemos es una hipótesis más prudente, más conservadora, de los tipos de interés a diez años de nuestra deuda, que pasan a estar en el 1,3 y 1,4 por 100, respectivamente, en 2015 y 2016, hasta tipos del 2,1 y del 2,6 por 100.

El resto de hipótesis son prácticamente idénticas y los cambios son marginales.

A partir de ahí, ya tenemos el cuadro macroeconómico del que, como saben ustedes, las cifras de crecimiento, tanto para este año, como para el próximo, fueron ya adelantadas por el presidente del Gobierno. El PIB real en el ejercicio 2015 pasa del 2,9 al 3,3 por 100 en estos momentos. Ello es consecuencia, fundamentalmente también, de los datos que tenemos del primer semestre. En el primer semestre de este año ya el Banco de España ha dicho, en relación con el segundo trimestre, que el crecimiento estaba próximo al 1 por 100 y eso, si lo anualizáramos, estaríamos en tasas de crecimiento anualizadas próximas al 4 por 100 en el primer semestre. Por lo tanto, al incluir una proyección del 3,3 por 100, seguimos siendo, como ocurre habitualmente, prudentes, cautos y bastante conservadores, desde el punto de vista de la proyección.

Aquí lo que se ve, en el año 2015, si me permiten ustedes, es una mejora marginal de la demanda doméstica y donde sí, efectivamente, hay una mejora, una aportación más positiva al crecimiento, es en el sector exterior, es decir, la demanda externa neta, que mejora en dos décimas con respecto a lo que teníamos en la proyección que se había realizado para el año 2015 en nuestro Programa de Estabilidad.

La modificación del año 2016 es menor, es solamente de una décima, como saben ustedes. Eso, a veces, incluso ocurre simplemente por la inercia del mayor crecimiento del año 2015, pero la diferencia es muy, muy, reducida. Es decir, proyectamos un crecimiento que se mantiene, como decía anteriormente, en el 3 por 100.

Otros datos importantes en los que, a lo mejor, si hay más variación y en los que pueden tener un impacto, desde el punto de vista de lo que es otra serie de variables, es que hemos actualizado el deflactor del consumo privado. Esto es, básicamente, la media del IPC. En el año 2015, en nuestro Programa de Estabilidad, preveíamos que sería negativa, en el entorno del 0,4 por 100, mientras que ahora nos vamos al -0,1 por 100. Hemos visto que ha habido un cierto repunte en la inflación, que ya ha entrado en terreno positivo en el último mes. Y para el año 2016 también subimos en dos décimas la proyección de inflación o, en este caso, del deflactor del consumo privado de dos décimas.

También, en consonancia con lo que es la evolución del deflactor del PIB, el PIB nominal mejora, se incrementa, en dos décimas, del 3,6 al 3,8 por 100, en el año 2015, y del 3,8, también en dos décimas, hasta el 4 por 100 en el año 2016.

La evolución del empleo es prácticamente idéntica a la que habíamos establecido, a la que habíamos ya proyectado, en nuestro Programa de Estabilidad. Si acaso, hay una ligera mejora, tanto en tasa de paro, en términos de Contabilidad Nacional, como en lo que es empleo. Prácticamente se mantiene, como ven ustedes, en el 3 por 100, tanto para el año 2015, como el año 2016, la tasa de creación de empleo y es idéntica prácticamente a lo que teníamos en nuestro Programa de Estabilidad.

No hay una modificación importante ni en el saldo de la cuenta corriente ni en el tema de la capacidad o necesidad de financiación al respecto.

También, a lo mejor es importante si pasamos a ver las proyecciones, concretamente, del mercado laboral. Sobre el mercado laboral, hemos recogido lo que es la Tasa de Variación del Empleo en los años 2011, 2014 y 2015; la media anual en términos de la Encuesta de Población Activa. Después, lo que tenemos es la comparación de cuatro trimestres de los año 2011, 2014 y 2015, para que nos dé una idea de años completos. En el año 2015, comparando el cuarto trimestre del 2015 con el cuarto trimestre del año 2014, hay una creación de empleo por encima de los seiscientos mil puestos de trabajo (después veremos cuánto supone eso en términos de creación en estos dos últimos años, que supera claramente el millón de puestos de trabajo) y también lo que se indica es algo que ya se recogía en nuestro Programa de Estabilidad, y es que el empleo a lo largo de la Legislatura va a ser más elevado, según la EPA, en el cuarto trimestre del año 2015 que lo que teníamos en el cuarto trimestre del año 2011.

Con la evolución de la tasa de paro, según la EPA, nos encontramos en el cuarto trimestre del año 2011 con 5.287.000 y nuestra proyección en estos momentos es que acabe el cuarto trimestre del año 2015 con algo más de 4.860.000 empleos, lo cual supondría, en relación con el último año, una reducción del paro de cerca de seiscientas mil personas, y también una reducción muy notable del paro, del número de personas en paro, según la EPA, en comparación del cuarto trimestre del año 2011 con el cuarto trimestre del año 2015.

Si nos vamos a las tasas de paro --también, otra vez, siempre en EPA--, lo que se ve es que al inicio de la Legislatura teníamos una tasa de paro del 22,6 por 100 y a finales del año 2015 nuestra proyección es que sea del 21,1 por 100; es decir, que estemos, aproximadamente, un punto y medio por debajo del inicio de la Legislatura.

También es ilustrativo de la evolución del empleo, que es, lógicamente, el objetivo fundamental de toda política económica, la evolución en la crisis desde el año 2008. Se ve perfectamente como la destrucción de empleo es especialmente intensa en el año 2009; posteriormente, en el año 2012, y en el año 2013 ya prácticamente nos encontramos con una destrucción de empleo ligeramente por encima de los 200.000. A partir de ahí, se empieza a crear empleo. Yo lo tuvimos en el año pasado, en el año 2014, con una creación de empleo de empleo de 434.000 personas, comparando siempre la variación del cuarto trimestre versos el cuarto trimestre, y, en el año 2015, de por encima de seiscientos mil empleos nuevos, según la EPA. La suma de los dos lo que nos da es que en los años 2014 y 2015 la economía española va a crear más de un millón de puestos de trabajo.

Por último, lo que es el resumen de la crisis. A veces, uno pierde ya la perspectiva desde que se inició la crisis en el año 2008. Viendo las tasas trimestrales de crecimiento, trimestre a trimestre, de alguna forma reflejan las dos recesiones que tuvimos en la crisis: tienen ustedes la que empezó a principios de 2008; después, hubo una recuperación, que fue una recuperación prácticamente inexistente en el primer y el segundo trimestre del año 2010; y, a partir de ahí, volvemos otra vez a caer, prácticamente en tasas de crecimiento trimestrales negativas, con lo que se inicia la segunda recesión de la crisis, la que dura prácticamente hasta finales de 2012-mediados del año 2013.

A partir de ahí, ya las tasas de crecimiento empiezan a ser positivas y ya, desde mediados del año 2013, llevamos ya ocho trimestres de tasas de crecimiento positivas, con, además, una tasa de crecimiento en aceleración. Vemos como, efectivamente --lo que decía anteriormente--, que la tasa de crecimiento de la economía española en los dos últimos trimestres, si anualizáramos las tasas trimestrales de crecimiento, nos llevaría a tasas anualizadas próximas al 4 por 100. De algún modo, lo que indica es que, por primera vez desde el inicio de la crisis a principios del año 2008, la economía española empieza a ver la luz al final del túnel.