Intervención de Isabel Celaá

15.6.2021

  • x: abre ventana nueva
  • Whatsapp: abre ventana nueva
  • Linkedin: abre ventana nueva
  • Enviar por correo: abre ventana nueva

Muchas gracias, ministra Portavoz. Buenos días a todas y a todos. Contenta de estar con ustedes una vez más.

En primer lugar, voy a referirme a una cuestión puntual. Esta misma mañana hemos acordado en Consejo de Ministros una declaración institucional para homenaje a la comunidad educativa, a los profesores, a las familias, a los alumnos, por haber mantenido, a haber sido capaz de mantener los centros abiertos aún en situaciones bien difíciles, como ha sido la pandemia. Esta declaración institucional será leída, será tenida en cuenta, en un acto homenaje, como digo, en sábado, día 19, a las once de la mañana, presidida por el presidente de Gobierno.

Y ahora sí, ahora ya, entró de lleno en lo que ha sido la presentación del anteproyecto o primera lectura de la ley, cuando lo sea, de la Ley de Integración y Ordenación, de Ordenación e Integración de la Formación Profesional.

Uno de los objetivos de prioritarios del Ministerio que dirijo, como ustedes bien saben, es transformar la Formación Profesional. Es un objetivo sostenido desde el año 18. Queremos que sea una formación, que haya una Formación Profesional de primer nivel, que dé respuesta a las demandas del mercado laboral y responda a los intereses, expectativas, aspiraciones de cualificación profesional de las personas a lo largo de su vida, es decir, desarrollo de la personalidad, desarrollo del talento hasta el máximo y obviamente, servicio a lo que es el modelo productivo del país.

Desde que llegamos al Gobierno hace tres años, estamos trabajando en este objetivo, en diálogo permanente con los interlocutores sociales y las entidades que forman parte del ecosistema de Formación Profesional.

Nuestro país, como también ustedes probablemente me han oído decir, presenta desde hace décadas varios problemas estructurales a los que pretendemos dar solución.

Voy a citarles solo cuatro.

Primero, el desequilibrio entre el nivel de formación y las necesidades del mercado laboral, como refleja el escaso número de técnicos de grado medio. Actualmente son el 25% de la población activa, cuando el propio Centro Europeo de Desarrollo de la Formación Profesional nos dice que en 2025 el 50% de trabajos requerirán una cualificación intermedia. Frente a ello, el porcentaje de desempleo juvenil, como ustedes conocen alto, superior al treinta y tantos por ciento, es más del doble de media de la zona euro.

Segundo, la baja acreditación de las competencias profesionales, un 46% ciento, es decir, más de 10 millones de personas, nos lo encontramos en el 48%, no tiene reconocidas oficialmente sus competencias profesionales adquiridas por la experiencia laboral. Estos son datos de las últimas encuestas de población activa.

Tercero, el escaso tiempo que se atribuye a la formación de los trabajadores. Estamos en 17 horas anuales frente a 50 horas, por ejemplo, en Alemania.

Y, cuarto, una tasa baja de matriculación de alumnos y alumnas en Formación Profesional. Estamos a la mitad de la media europea o de la OCDE, un 12% frente a un 25 a un 29 de la Unión Europea.

Para superar todos estos retos, el anteproyecto que hemos presentado hoy en primera lectura al Consejo de Ministros establece un nuevo ordenamiento mucho más flexible, mucho más acomodarle a las necesidades del país, que responde obviamente a las demandas de Formación Profesional de la ciudadanía. Nos encontramos ante una realidad completamente diferente, un escenario económico y productivo que se corresponde con una revolución industrial, la cuarta revolución industrial, en permanente cambio, en un cambio aceleradísimo, con necesidades formativas y competenciales nuevas. Para una realidad económica distinta necesitamos una nueva Formación Profesional radicalmente diferente a lo que hemos venido conociendo.

En el nuevo modelo se sustenta en la participación, la corresponsabilidad público-privada, la estrecha vinculación entre los centros de formación y las empresas, la conexión, y esta es una palabra clave, la conexión de la oferta con la realidad laboral. Mundo de formación con el mundo productivo. Innovación e investigación aplicada o emprendimiento.

La futura Ley de Ordenación e Integración de la Formación Profesional supone un salto radical respecto a la regulación anterior, pues presenta un sistema único. No hay pérdida de eficacia. Es un sistema único de Formación Profesional a lo largo de la vida, en lugar de los dos subsistemas que estábamos acostumbrados a conocer, en los que estaba dividida la Formación Profesional hasta ahora, uno se correspondía con la formación a los jóvenes en el ámbito educativo, otro que se correspondía en el ámbito profesional.

El nuevo modelo acompaña a las personas desde el sistema educativo y durante su vida laboral. La cuestión es formación a lo largo de la vida. Este sistema está directamente conectado con la empresa, tanto para su integración en el consejo de la Formación Profesional, tanto para su posición entre las empresas, desde el observatorio, desde donde se va a hacer buena prospectiva de los perfiles profesionales necesarios a medio y a largo plazo, como desde la propia gobernanza del sistema.

Es una formación, además, que tiene importantes propiedades, es acumulable, es flexible, es capitalizable y es acreditable, cuestión importante, que queremos hacer contemporánea e internacional. Vamos a internacionalizar nuestra Formación Profesional, con la incorporación de al menos una lengua extranjera, con títulos también dobles entre la Formación Profesional española y la Formación Profesional extranjera. Intentamos que haya estancias en centros de trabajo de otros países, tanto de estudiantes como de docentes.

Estamos diseñando una oferta única, diversa, que sume y con la que la persona pueda diseñar su propio itinerario formativo. Por primera vez ponemos a disposición las llamadas, de todas las personas, las llamadas micro formaciones, unidades formativas de corta duración, pueden tener 30 horas, 50 horas, accesibles para cualquier ciudadano. Cualquier ciudadano va a saber a qué puerta tiene que tocar para conseguir una formación que será parte de su mochila formativa, independientemente de sus circunstancias laborales o personales, desde cualquier lugar del país, en cualquier situación.

Las modalidades serán muchas. Habrá modalidades presenciales, habrá modalidad online, hay modalidad parcial, ya las hay, modalidad modular, y, finalmente la del título.

Por lo tanto, toda la oferta se nutrirá de distintos, ascenderá en forma ascendente a través de distintos grados: Grado A, acreditación parcial de competencias, Grado B, certificado de competencia profesional, Grado C certificado de profesional, D y E, Ciclos Formativos.

El Grado D se corresponde con los ciclos formativos Grado Medio y Grado Superior y el Grado E se corresponde con la especialización que se pueda hacer después de un grado medio o un grado superior.

Una especialización después de un Grado Superior, y les recuerdo a ustedes que un Grado Superior tiene 2.000 horas que ha debido cursar en ciclo medio, 2.000 horas, otras 2.000 horas en ciclo superior y además un curso de especialización generalmente de 600 horas. Esto merece un título profesional. Sin embargo, si es Grado Medio o en un curso de especialización, será un especialista.

Esta nueva estructura va a facilitar el acceso a todo un abanico de formaciones de distinta duración y volumen de aprendizajes, que incluye, como les digo, por primera vez, unidades formativas o micro formaciones, del Grado A, hasta alcanzar todos los títulos y cursos de especialización, D y E.

De esta forma, cada persona puede diseñar, es dueña de hacerlo, diseñar sus propios itinerarios personales, adaptado a sus expectativas profesionales, sus circunstancias personales o necesidades laborales. Una persona que esté trabajando y quiera acreditar sus competencias profesionales legítimamente, obviamente, puede cursar una Formación Profesional online para llegar a acreditar más.

Con este esquema, toda la formación, toda la formación, que está relacionada con las cualificaciones con el Sistema Nacional de Cualificaciones Profesionales en Nomenclatura Europea, toda la formación tiene validez académica y profesional. Toda la oferta en los ciclos de los grados C, D y E, tiene carácter dual. De nuevo, y por primera vez, se regula en España el carácter dual, es decir, una Formación Profesional dual, dual con dos intensidades, que ya les comento ahora.

La Formación Profesional dual general, en la que incrementamos, o para la que incrementamos el número tradicional de horas en las empresas, hasta llegar a un 25 o 35% en la duración total de la formación en empresa, se distribuye a lo largo de los dos cursos, de las 2.000 horas y Formación Profesional dual avanzada, con una formación en empresa entre el 35 y el 50 de la duración total de la formación, y esta modalidad, esta última, la intensiva, la dual avanzada, en sus propios términos, es aquella que se establece a través de una relación contractual entre el estudiante, ya sea este estudiante-estudiante, o sea un trabajador, entre el estudiante con la entidad.

Se refuerza así la relación entre los centros de Formación Profesional y los centros de trabajo. La formación se impartirá tras una distribución previa entre ambas partes de las tareas formativas y de los contenidos curriculares, siempre, bajo la responsabilidad de las comunidades autónomas y los centros, es decir, siempre bajo la tutela, bajo la batuta, de administraciones educativas.

Cada estudiante ha de disponer, por tanto, de un plan personalizado. El texto incorpora la figura del tutor dual del centro y del tutor dual de empresa, que llevarán a cabo entre ambos, entre otras tareas, la evaluación de los aprendizajes del alumnado en cada uno de sus respectivos espacios, aunque la evaluación final será responsabilidad del centro de formación, que quede claro.

La norma también agiliza el sistema de acreditación de competencias, es decir, estamos hablando de formación, pero también lo que hace es acreditar las competencias profesionales adquiridas mediante la experiencia laboral y vías no formales de formación. El texto consolida el procedimiento abierto de manera permanente, y este es el cambio, este es el valor añadido, como sabéis, en nuestro país, como saben ustedes, en nuestro país, logramos acreditar las competencias profesionales de 300 mil personas en diez años. Ahora lo que vamos a hacer es acreditar las competencias profesionales de 3 millones de personas en cuatro años. ¿Cómo? Cambiando el procedimiento. No va a ser a través de convocatorias coyunturales, sectoriales, que de vez en cuando se cursan en alguna comunidad autónoma. No, el servicio será permanente, estructural, abierto en todos los centros educativos. Y como saben ustedes, a los centros educativos de la Formación Profesional se incorporan también aquellos centros que estaban, que eran de la red de empleo, formando una cubeta con vasos comunicantes y todos ellos formando con el mismo objetivo.

Hasta este momento, como les digo, el procedimiento era lento, poco eficiente desde nuestro punto de vista, habida cuenta de los resultados obtenidos en esta década. Pero ahora vamos a mucha más velocidad, porque necesitamos avanzar más rápido, porque otros también han avanzado, digo países de nuestro entorno. Este año ya, estamos acreditando la experiencia laboral de casi medio millón de personas, de conciudadanos y conciudadanas que van al centro de referencia y encuentran unas un asesor y un evaluador, y de esa manera pueden empezar a acreditar lo que tienen adquirido por competencia profesional.

La Formación Profesional, además, va a tener también una estrecha relación con la universidad. En el anteproyecto se recoge el reconocimiento mutuo para facilitar el establecimiento de itinerarios formativos que reconozcan la formación previamente adquirida en ambas enseñanzas. Además, impulsa nuevos modelos de colaboración, desarrollo de proyectos compartidos, préstamo de espacios y equipamientos, para generar una transferencia de conocimiento, es decir, puertas abiertas, que corra el aire, siempre el conocimiento que es expansivo y que se transmite de la Formación Profesional a la Universidad y de la Universidad de Formación Profesional. Se trata de optimizar todos los recursos al alcance del país.

Para ordenar este nuevo sistema de Formación Profesional, el anteproyecto crea nuevos instrumentos de gestión. Muy importante. Se crea un Registro Estatal de Formación Profesional que permitirá a cualquier ciudadano en cualquier momento, en cualquier punto de España, obtener un informe de su vida formativa o profesional actualizado con su experiencia formativa. Además, se crean también distintos catálogos modulares y se crea también otro registro estatal, también muy importante, donde aparecerán reflejadas todas las acreditaciones de la Formación Profesional, de las competencias profesionales. Los dos registros, el Registro Estatal de Formación Profesional, que permite obtener al ciudadano acreditación de su vida formativa y el Registro de Acreditación de Experiencia Laboral estarán tremendamente, constantemente, combinándose porque hay que actualizarlos.

También creamos un Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales y el Catálogo de Estándares de Competencia Profesional.

Nuevo cuerpo docente de profesores especialistas. Como ustedes saben, la LOMLOE incorporó a el cuerpo de secundaria, a los profesores, también técnicos de Formación Profesional que tenían la titulación correspondiente, es decir, que eran licenciados. Y quedo un profesorado que no tenía titulación superior, pero que obviamente, es imprescindible para el desarrollo de las actuaciones en Formación Profesional. Este nuevo cuerpo de profesores se crea en esta ley. Son especialistas en sectores singulares de Formación Profesional. Es decir, son esas especialidades que obviamente no tienen su correlato, no tienen su correspondiente a nivel universitario. Ejemplo, soldadura. Ejemplo, peluquería.

La futura ley también atiende y este es un aspecto muy importante, la internacionalización de la formación, atiende a las recomendaciones de la Unión Europea en esta materia y regula la participación en proyectos y organismos internacionales. La convocatoria de proyectos de formación entre centros españoles y extranjeros, queremos que el titulado en Formación Profesional conozca al menos una lengua extranjera y pueda trabajar en Madrid, en Oporto, en Berlín o donde pueda encontrar el puesto de trabajo y sea valorado a modo de cómo se valoran otros profesionales en las empresas en las que trabajan. Por tanto, esto obviamente eleva varios peldaños, muchos peldaños a la Formación Profesional española.

Como ven, la Formación Profesional es para este Gobierno, una estrategia de país, capaz de desarrollar el talento, todo el talento, en esto se alinea, obviamente, con el pilar social, de pilar europeo de Derechos Sociales, la Carta Social Europea, obviamente con la Constitución, como ven, es, por tanto, es una prioridad de nuestro Gobierno, es una prioridad del Ministerio de Educación que tengo el honor de dirigir, y para la redacción de esta ley hemos apostado y seguimos haciéndolo por el diálogo permanente. Desde el arranque de los trabajos hemos tenido importantes conexiones, e importante relación con las empresas, ya sea en la CEOE, CEPYME, sectores sociales, es decir, secciones sindicales y ONGs, grupos parlamentarios… en fin, es un proyecto que está abierto y que ha abierto una expectativa muy positiva a su paso. Así que trabajamos también con sectores intermediarios, como las Cámaras de Comercio. Esta es una cuestión que en Alemania se utiliza mucho. Cuando tenemos empresas más pequeñas podemos hacer clusters y trabajar a través de organismos intermedios.

Así que la nueva ley modernizarla absolutamente el sistema. Pero es más que modernizarlo. No es un barniz, no es una pintura, es un cambio radical, un cambio radical en el cual efectivamente construimos un sistema único, dejamos de perder eficiencia, es decir, taponados todas las vías de pérdida de eficacia en el país, y vamos a una formación absolutamente reconocible que suma y que además, abarca todo lo que es la formación del estudiante y la formación de todos nuestros conciudadanos, en un dibujo de formación a lo largo de la vida, con el que conectamos con Europa con toda seguridad.

Nada más a su disposición.