Tres Cantos, Madrid
INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL GOBIERNO, PEDRO SÁNCHEZ
Muchísimas gracias, Ted, y gracias, ministro, y resto del equipo del Ministerio de Transformación Digital y Administración Pública, y también a toda la familia de Netflix. Estimado Ted, gracias a ti y a todo el equipo de Netflix.
España lo que hace es acoger sin duda alguna vuestra presencia, vuestra recepción hoy aquí y vuestro firme compromiso con el desarrollo de una industria tan vibrante, tan importante, cada año más, para la economía española, como es la industria audiovisual desde hace ya 10 años. Un compromiso más patente por esa inversión que acabas de anunciar de 1.000 millones de euros para los próximos cuatro años y que, desde luego, nosotros agradecemos de corazón.
Cuando hace una década Netflix llegó a nuestro país, a España, no solo cambió la forma en la que veíamos los usuarios las películas y las series de esta plataforma. Creo que cambió algo mucho más profundo, que es lo que me gustaría compartir con todos ustedes: y es la manera en la que el mundo veía a nuestro país, a España.
Desde entonces, miles de profesionales han soñado, han escrito, han rodado y han editado historias que cruzan fronteras, como hemos visto en esta pantalla. Historias hechas en nuestro idioma, en español, con nuestro propio acento, con nuestra propia mirada. Historias con alma española, que ha reconocido nada más y nada menos que el CEO de Netflix, que nacen en nuestros barrios, en nuestros pueblos, en nuestras ciudades, en un magnífico plató -como se ha relatado en este vídeo- que es nuestro país, y que acaban conquistando pantallas en todo el mundo, ya sea la capital surcoreana, Seúl, Buenos Aires, Nueva York y una larga lista de ciudades a lo largo y ancho del mundo.
Más de mil títulos españoles, como hemos visto, rodajes en todas las comunidades autónomas, también en las ciudades autónomas, con doblajes, con subtítulos también en lenguas que son importantes para la cultura y el patrimonio y la identidad de nuestro país como es el catalán, el euskera y el gallego. Muchos de los planos, de las escenas que aparecen en esta plataforma son nuestra mejor campaña de promoción cultural y turística, con lo cual estamos absolutamente encantados. De hecho, el propio Ted me ha dicho que tiene ganas de conocer muchas de esas ciudades en las que se han rodado muchas de esas series y esas películas, porque efectivamente son lugares que se dan a conocer gracias a esas series y a esas películas.
Títulos españoles de Netflix han generado más de 5.000 millones de horas de visualización en el año 2024. Yo conozco en mi casa unas cuantas que han contribuido a esas horas. Cuatro temporadas de series españolas y cuatro películas están entre los 10 títulos más populares en lengua no inglesa mundialmente.
Pero, en fin, como en las mejores historias, no empezamos de arriba. Creo que España venía de atrás, de muy atrás. Hoy, en un giro de guion digno de la mejor serie de Netflix, nuestro país es uno de los mejores y más señalados líderes mundiales en eso que se llama en inglés el soft power, el poder blando, tan importante en un momento en el que necesitamos construir puentes y no precisamente romper puentes entre sociedades, y el entendimiento y la convivencia entre nuestros conciudadanos; no me refiero a España, me refiero al mundo en general.
Somos el cuarto en influencia por nuestra cultura, por nuestro patrimonio, que transmitimos gracias precisamente a la fuerza de nuestro idioma, el cuarto más hablado del mundo.
Este éxito de país se hace visible donde más importa, que es la creación de empleo y de riqueza. En definitiva, hoy, las industrias culturales y creativas están en un momento extraordinario: representan en términos macro el 2,3% del valor añadido bruto nacional -es decir, es lo que se aporta al PIB por parte de la industria cultural y creativa- y dan empleo a 770.000 personas a lo largo y ancho de nuestro país. Nunca habíamos tenido tanta gente trabajando en estos sectores y la satisfacción es aún mayor sabiendo que mucho de ese empleo es vocacional.
Solo en el año 2024 en el sector audiovisual se han producido 376 largometrajes en España, un 70% más que en el año de la pandemia, en 2020, lo que yo creo que pone de manifiesto la apuesta decidida que ha hecho el conjunto de la sociedad, las empresas, el tejido, el ecosistema que vosotros representáis, y también lógicamente las instituciones públicas -y en este caso hablo también en nombre del Gobierno de España-. Por cierto, más del 46% están coguionizados o codirigidos por mujeres. Creo que es muy importante, Ted, lo que habéis puesto en esa pantalla de vuestro compromiso con la igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres. Y, por tanto, ya somos el segundo productor europeo de películas tras Italia.
Netflix, evidentemente, contribuye decisivamente a este éxito y yo quiero agradecer de nuevo vuestro compromiso, apoyando la creación de más de 20.000 empleos. Porque colabora además con más de 60 productoras nacionales -esto es algo que siempre se nos ha demandado por parte del sector en nuestro país y que hemos tratado, humildemente, desde España, de contribuir desde el Gobierno a ello-; en su mayoría es como el paisaje empresarial en nuestro país: son pequeñas y medianas empresas que representáis y representan el corazón de nuestra industria creativa.
También lo hacemos desde las instituciones y creo que es importante que repasemos solamente ese compromiso que iniciamos después de la pandemia con los fondos Next Generation. Porque el papel de la iniciativa Spain Audiovisual Hub, que cuenta -en sus dos fases- con un presupuesto de 3.300 millones de euros creo que también demuestra el compromiso que desde el Gobierno de España hemos venido acompañando a toda la transformación que vosotros habéis liderado. Esos fondos, ese Spain Audiovisual Hub, me parece que es clave, porque representa esa colaboración público-privada que nos ha permitido entre otras cosas, por ejemplo, aumentar en un 30% la producción audiovisual y de vídeojuegos en nuestro país. Creo que esto es también muy relevante ponerlo en valor, porque es fruto de todo el esfuerzo compartido que hemos hecho administraciones públicas y el sector privado. Hablamos de atraer inversión internacional, también de atraer talento, para construir un potente ecosistema que pueda competir en igualdad de condiciones con los grandes mercados globales. Pero también, lógicamente, reivindicar el talento español, el talento que tenemos en nuestro país. En este sentido, lo importante para el Gobierno de España es que se impulse lo que venimos haciendo en los últimos años, y es una formación inclusiva. Recientemente sabéis que hemos lanzado las nuevas ayudas para escritura de guiones, poniendo el acento, por ejemplo, entre las mujeres guionistas y también las lenguas cooficiales.
En definitiva, lo que quiero decir con esto es que tenemos entre todos que usar este poder blando, este soft power, para tender puentes, para potenciar un nuevo diálogo digno del mejor guion. Para poner de moda a un país como España, a través de algo tan poderoso como es la creatividad, como es la cultura. Una cultura que es entretenimiento, sin duda alguna, pero también -como padre os lo digo- creo que es importante no perder de vista que es educación. Es entretenimiento, pero es también educación. Una cultura que nos enseñe a mirar el mundo con nuevos ojos, a comprender realidades distintas. La cultura es sobre todo libertad, es la autonomía para poder comprender de manera autónoma qué lo que está sucediendo en el mundo y en nuestra sociedad. Porque en un mundo donde los nuevos gurús -y yo los calificaría de oscuros- buscan censurar e imponer su visión, contar historias valientes es un acto de rebeldía pacífica y creo que también es un canto a la pluralidad.
Concluyo. Si hace unos años copamos las pantallas de medio mundo con La Casa de Papel, hoy venimos a conquistarlas con un objetivo: que España sea esa casa de las culturas. A todos vosotros y vosotras, si me permitís que os tutee, que hacéis posible la magia del audiovisual día a día -guionistas, directores, directoras, productores, productoras -y además quiero poner especial énfasis en la cuestión de género-, actores y actrices, montadores y montadoras, técnicos y técnicas, y expertos y expertas digitales; seguro que me dejo a buena parte de la industria y de los representantes en esta mención- lo que os quiero dar es las gracias en mi nombre y en nombre lógicamente del Gobierno de España. Estamos de vuestro lado y seguiremos estándolo durante los próximos años. Muchas gracias.
(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)