Intervención del presidente del Gobierno en la apertura del 'GSMA Mobile World Congress 2024'

Barcelona

INTERVENCIÓN DEL PRESIDENTE DEL GOBIERNO

Muchas gracias. Majestad; presidente de la República de Paraguay; presidente de la Generalitat; ministros; alcalde de Barcelona; director general del GSMA; autoridades; señoras y señores.

Quisiera, en primer lugar, trasladarle a Su Majestad el Rey el que, un año más, esté con nosotros acompañándonos aquí, en Barcelona. Gracias, señor, por su apoyo a un evento en el que siempre habéis estado presente; gracias por vuestro constante compromiso con la innovación, con el progreso y con la ciudad de Barcelona.

Gracias, Mats, por tu compromiso con esta extraordinaria ciudad. Esta nueva edición del MWC demuestra lo que ya sabemos: la capacidad de Barcelona y Cataluña para atraer talento, creatividad y espíritu emprendedor. Estimular las ideas más disruptivas y acoger a quienes las impulsan.

Barcelona y España abrazan la transformación digital como una oportunidad única. No es casualidad que grandes empresas como Amazon, Meta, Google o IBM, y más recientemente Microsoft, hayan elegido España como destino privilegiado para sus inversiones en Europa.

Señoras y señores, hemos trabajado mucho, mucho, para merecer esa confianza creciente. Permítame ilustrarlo a través de cinco grandes prioridades:

En primer lugar, impulsando, lo ha dicho en muchas ocasiones el CEO de Telefónica, el despliegue de la fibra óptica con una inyección de más de 1.000 millones de euros desde el año 2018. Y, gracias a esa apuesta, nuestro país, España, se sitúa 35 puntos por encima, no uno ni dos, 35 puntos por encima de la media de la Unión Europea y es un referente absoluto en este ámbito a nivel continental.

En segundo lugar, apostando con decisión por cerrar eso a lo que antes ha hecho referencia a Mats en su intervención: cerrar la brecha digital entre el medio rural y también el medio urbano. Hoy, cualquier usuario de nuestro país, viva donde viva, puede acceder a una conexión de alta velocidad por un precio asequible de 35 euros.

En tercer lugar, reforzando eso que hemos venido en llamar la autonomía estratégica abierta en Europa, crucial en la producción de los semiconductores. Destinamos a este fin un volumen de recursos sin precedentes, cercano al 1% de nuestro PIB, a través del proyecto estratégico, el PERTE, fundamental para impulsar la reindustrialización en este sector de los semiconductores y de los chips, no solamente en España sino también a nivel europeo.

En cuarto lugar, comprometiéndonos con la formación digital para que nadie se quede atrás en este gran salto tecnológico. Hemos creado más de 41.000 plazas de formación profesional en el ámbito de la digitalización y vamos a crear 10.000 más en materia de ciberseguridad.

Y, por último, impulsando la transformación digital en nuestro tejido empresarial.

España, lo saben ustedes, es un país de pequeñas y medianas empresas. Más de 330.000 de ellas se han beneficiado ya de los recursos habilitados por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

Con idéntica vocación, acabamos de poner en marcha lo que hemos llamado el fondo Next Tech, dotado con 4.000 millones de euros para el apoyo al crecimiento de las empresas tecnológicas en nuestro país.

Y permítame que me detenga brevemente en un debate que ha ganado enorme notoriedad y que va a estar muy presente, estoy convencido, a lo largo de esta semana aquí en Barcelona. La aparición hace algo más de un año de los chatbots generados por grandes modelos lingüísticos de propósito general que ha situado a la inteligencia artificial en el centro de todas las miradas y en el centro de la conversación pública.

Creo que es imprescindible una reflexión profunda sobre el impacto de esta tecnología en nuestra sociedad, en nuestros derechos, en nuestras libertades, en nuestra democracia, pero también en el mercado de trabajo o en el diseño de las políticas públicas.

Desde el Ejecutivo central, desde el Gobierno de España, ¿qué es lo que hemos hecho? Hemos querido aprovechar las enormes oportunidades que ofrece la inteligencia artificial, comenzando por mejorar la productividad de nuestra economía, también del sector público como elemento tractor del resto de la economía.

Contamos con un activo impresionante, que está aquí, en la ciudad de Barcelona, en la capital de Cataluña, en una de las principales ciudades de España, el Barcelona Supercomputing Center y la Red Española de Supercomputación, que vamos a reforzar y que vamos a impulsar, para acelerar el despliegue de la inteligencia artificial generativa en nuestro tejido productivo, en nuestro sistema científico y también en el diseño de las políticas públicas.

¿A qué aspiramos? Aspiramos a que España juegue un papel relevante a nivel europeo y a nivel internacional en el desarrollo de la inteligencia artificial.

Y por eso, señor, Majestad, señoras y señores, me gustaría anunciarles que vamos a trabajar en estrecha colaboración público privada con el Barcelona Supercomputing Center y la Red Española de Supercomputación, junto con la Academia Española de la Lengua y con la Asociación de Academias de la Lengua Española en la construcción de un gran modelo fundacional de lenguaje de inteligencia artificial, entrenado específicamente en español y por supuesto, las lenguas cooficiales, en código abierto y transparente.

Este es el anuncio que me gustaría trasladar al conjunto de la sociedad española y, lógicamente, también a todos ustedes. Porque, además, lo que pretendemos es hacer extensible esta iniciativa incorporando a países iberoamericanos y celebro el que tengamos aquí presente en el día de hoy al presidente de Paraguay.

Esta es la vía española hacia el progreso, señoras y señores. Un camino en el que la transformación digital está al servicio de la conquista de más derechos por parte de la ciudadanía, que impulse una economía dinámica, abierta al futuro, capaz de ofrecer un terreno de juego equitativo a nuestras empresas y que genere más y mejores empleos.

Es la visión que nos guía en el despliegue de una estrategia global de protección integral de los más vulnerables en la red, nuestros menores. Estamos trabajando en esa dirección también. Es la visión que nos ha llevado a impulsar bajo la Presidencia española de la Unión Europea el pasado semestre, una regulación pionera en la inteligencia artificial a la que seguirán, estoy convencido, muchas más. O la creación de la primera Agencia de Supervisión de la Inteligencia Artificial, que se va a situar en la ciudad gallega de A Coruña. Es la visión que nos mueve para buscar el equilibrio entre la promoción activa de una tecnología llena de oportunidades, como es la inteligencia artificial, y una necesaria visión humanista con la que evitar sesgos, prejuicios y un socavamiento de nuestra democracia.

Somos muy conscientes de que todo el esfuerzo debe estar coordinado a la hora de abordar estos retos tecnológicos. Por eso defendemos una gobernanza global de la digitalización, una gobernanza que vaya más allá de nuestras fronteras europeas, donde ya contamos con la Carta de Derechos Digitales y que, por cierto, hicimos extensible en la Cumbre Iberoamericana celebrada en República Dominicana a esa carta de derechos digitales con una perspectiva iberoamericana y que, en definitiva, sitúa a las personas en el centro de esta transformación digital sin precedentes.

En fin, señoras y señores, concluyo. Esta tierra, de nuevo, aquí se ha dicho antes por parte del alcalde y también del presidente Aragonès, Barcelona está concentrando todas las miradas de este sector en esta semana. Creo que esta tierra merece que sea así. A fin de cuentas, nos encontramos en la ciudad de los prodigios, como un día la reconoció el gran escritor Eduardo Mendoza. No encuentro mejor forma de describir todo lo que veremos en este Mobile World Congress.

En definitiva, una ventana al progreso, a la innovación y a la tecnología. Una ventana desde la que mirar a un futuro que, por cierto, ya está aquí. Así que muchas gracias. Thank you very much. Moltes gràcies.

(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)