El ministro Luis de Guindos se reúne con el director general del Mecanismo Europeo de Estabilidad, Klaus Regling

España es un miembro fundamental del MEDE. Su participación en el fondo es la cuarta más importante (11,82% del capital del MEDE que asciende a 80.400 millones de euros) y juega también un papel muy importante en el futuro de la eurozona y de sus instituciones. El MEDE es, asimismo, acreedor de España.

La recuperación de España es un éxito en la historia de la reciente crisis. En los más de cuatro años desde que solicitó un programa de ayuda financiera para recapitalizar el sector bancario, España ha experimentado un robusto crecimiento (muy por encima de la media en la zona euro) con continua mejora del mercado laboral y caída del paro y un sector bancario totalmente saneado.

Sigue habiendo retos y el Gobierno español está comprometido con la consolidación fiscal y la aplicación de reformas estructurales para mantener el crecimiento.

Para subrayar este buen desempeño, España ha realizado pagos adelantados voluntarios para reducir su deuda con el MEDE, que ahora es de 34.700 millones de euros. España ha ofrecido devolver este año hasta 3.000 millones de euros adicionales, una petición que será valorada por los órganos de gobierno del MEDE. Esto demuestra las buenas condiciones de acceso al mercado de España y su cómoda posición de liquidez.

Para la zona euro, el caso de España demuestra lo efectivos que han sido los instrumentos del MEDE para lidiar con la reciente crisis. Recapitalizó el sistema bancario y apoyó una rápida reestructuración del sector financiero que, junto con la amplia agenda de reformas aplicada en paralelo por el Gobierno español, convirtió a España en una de las economías que más rápido crece. El MEDE cree que este ejemplo debe continuar inspirando a los países de la eurozona donde las reformas sostienen la tendencia actual de crecimiento y proporcionan prosperidad duradera a los ciudadanos europeos.

De cara al futuro, tanto España como el MEDE siguen comprometidos en trabajar juntos para promover políticas económicas sensatas, completar la Unión Bancaria y profundizar en la construcción de la Unión Económica y Monetaria; todo ello es esencial para la resiliencia de la zona euro.

El ministro De Guindos felicitó al director general, Klaus Regling, por la renovación de su mandato y el buen trabajo de los últimos años.