Intervención del presidente del Gobierno en la XXXIX Gala Nacional del Deporte Español

1.4.2019

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La Nucía (Alicante)

Presidente.- Muy buenas tardes a todos y a todas, querido presidente de la Generalitat Valenciana, señor Alcalde de La Nucía, señora presidenta del Consejo Superior de Deportes, señor presidente de la Asociación Española de la prensa deportiva, Julián. Antes de nada, como me has pedido un encargo, me has hecho una encomienda, como me has calificado, tengo que decirte que en este trascurso de la gala, pues, he tenido ocasión de poder hablar con la ministra de Hacienda y para el próximo curso, para la próxima campaña, el periodismo estará reconocido en el impuesto de actividades económicas conforme también a la Federación Española de Municipios y Provincias.

Antes de nada, me ha emocionado mucho, y quería también compartirlo con todos vosotros y vosotras -me permitiréis que os tutee-, el que se haya un reconocimiento explícito por parte de la Asociación a los grandes campeones, a los jugadores de esa película que nos conmovía a todos, y que hayan subido aquí tanto Alberto como Jose.

Y yo tuve ocasión de conocerlos a ellos, hace unas cuantas semanas. Y, simplemente, quería comentaros a todos los demás que ellos se dieron a conocer por esa película. Pero uno de ellos, por ejemplo, Alberto, ha sido una persona que ha luchado durante muchos años, muchos años de su vida para que las personas con distintas capacidades pudieran ejercer el derecho al voto, y gracias a personas como Alberto, el próximo 28 de abril habrá 100.000 personas más en nuestro país que puedan ejercer el derecho al voto.

Así que, gracias Alberto, y gracias a las personas como tú que han luchado por el reconocimiento de ese derecho.

Amigos y amigas,

Me vais a permitir, y, además, con el permiso de mi admirado Emiliano, el gran jugador de Baloncesto del Real Madrid, que cite los objetivos de la Fundación del Club de Estudiantes, que es el equipo de mi adolescencia. Porque creo que esos objetivos son los de cualquier otro Club o Asociación Deportiva. Dice así: "Fomentar la vertiente formativa integradora y solidaria del ser humano". El deporte, como ya sabían los clásicos, nos facilitan la armonía del cuerpo y el bienestar psíquico. Nos sirve para aprender a competir con nobleza, a respetar las reglas del juego. A jugar limpio y a respetar, cómo no, al adversario. Nos sirve, en fin, para medir las limitaciones físicas de nuestra propia naturaleza, y tratar de superarlas, como han hecho muchísimas de las personas que aquí han sido premiadas y reconocidas.

El deporte es una actitud vital, una escuela de valores. Y es, sobre eso de lo que a mí me gustaría compartir con vosotros algunas reflexiones. Los valores. A través del deporte, podemos construir un mundo mejor, sin duda alguna. Y por eso, es necesario que se le dé al deporte el rango político que merece, que no quede reducido como a veces ocurre, a un noticiario de rivalidades o de enfrentamientos entre un equipo u otro.

El deporte une, no separa. Une a personas muy distintas en el intento de lograr un objetivo común: superar una marca, lograr un campeonato, lograr una medalla, o realizar una proeza.

Une también, porque en este mundo global, pocas cosas son tan globales como el deporte. Y no hablo sólo del fútbol, que también; del baloncesto, por supuesto, del ciclismo, del tenis o del automovilismo, sino de deportes que tienen menos popularidad. Y aun así, abren las puertas del mundo.

En España, lo hemos podido ver, en los últimos tiempos, por ejemplo, con Javier Fernández, un extraordinario campeón del patinaje artístico. Y vosotros, los deportistas, en definitiva, sois embajadores, a veces, de vuestro país, lo habéis sido, embajadores, también, de un club, pero sobre todo, y ante todo, embajadores de unos valores. Y por eso, vuestro ejemplo es tan determinante, tan inspirador, sobre todo, para la gente joven de nuestro país.

Hay miles o millones, quizá, de personas, entre ellos, miles o millones quizá de niños y niñas pendientes de vuestro esfuerzo, de vuestro comportamiento, de vuestra generosidad, en la disputa, en vuestra capacidad de trabajar en equipo, y de vuestra honestidad deportiva. De vuestro ejemplo.

El deporte, también, nos enseña a ganar y, sin duda alguna, como ha dicho antes Emilio, a perder. Y, probablemente, sea este la pérdida, una de las principales y mayores enseñanzas de la vida que nos encontramos en el deporte: perder, levantarse, aprender de los errores y competir. Perder, levantarse con humildad, y volver a intentarlo.

En pocas disciplinas está tan claro que perder no es fracasar. Que perder es la antesala de un futuro triunfo.

Puedo explicarlo con palabras, pero me gustaría apelar a la experiencia que conocimos este mismo fin de semana. Su protagonista es Ana Boada, medallista en el Mundial de Remo celebrado el año pasado. Y las palabras de Ana, en las que anuncia su retirada por culpa de una depresión, nos han conmovido a todos.

Hoy quiero reivindicar su nombre y su valentía para enfrentarse a una enfermedad mucho más habitual de lo que pensamos en el deporte de élite, para decirle: Ana estamos contigo. Agradecidos por lo que has alcanzado como deportista, pero más aún por tu humanidad al reconocer una faceta que también está presente en el deporte de competición, y que muchas veces queda oculta por los oropeles del triunfo.

Todos los que estáis aquí hoy sois líderes, sois campeones. Estáis aquí, justamente, porque habéis ganado campeonatos europeos, mundiales, en el año pasado, en el año 2018. Pero todos perdisteis alguna vez. Y volveréis a perder. Esa es la grandeza del deporte. Lo que más nos ata a él, la tenacidad, el deseo de superación, la humildad, para reconocer que siempre hay margen de mejora.

De todas formas, queridos premiados, queridas premiadas, no quiero relativizar todo. Lo importante no es participar. Lo importante es participar y ganar. ¡Qué sensación de euforia, de plenitud y de viveza se apodera de nosotros cuando se gana! ¡Qué satisfacción!, por el trabajo bien hecho. ¡Qué alegría, compartida con nuestros entrenadores, entrenadoras, si son deportes individuales, pero si son deportes de equipo también con el colectivo! ¡Qué felicidad, que somos capaces de transmitirles también aquellos que nos siguen! Ganar también exige enseñanzas y valores, desde la generosidad, desde la humildad y del respeto al rival. Por eso, enhorabuena, por haber participado y, sobre todo, por haber ganado.

Enhorabuena, por dar lo mejor de vosotros y vosotras mismas. Por buscar la superación, por romper, a veces, los límites, por llevar el nombre del deporte español a Europa y al mundo. Enhorabuena por la excelencia.

Dejadme que felicite de manera muy especial a Ana Dolores, como Teresa Perales, como Israel Oliver y como Michel Alonso, y a los esquiadores Joan Santa Cana y Miguel Galindo.

Si el deporte siempre es una actividad de superación personal, en el caso de la personas con algún tipo de discapacidad se convierte en una ejemplaridad sobresaliente. No renunciando, no resignarse. Ese es el mensaje, y es un mensaje poderoso. En todos los espacios de nuestra vida.

Probablemente sea el deporte uno de los ámbitos en los que la igualdad de oportunidades está más alcance de nuestras manos. Dependemos de nuestro esfuerzo y de nuestro empeño. Y somos capaces de alcanzar metas formidables.

El deporte es integrador, es inclusivo, nadie puede quedar apartado de él, sean cuales sean sus circunstancias.

Amigos y amigas,

Os he hablado de los valores que nos aporta el deporte, pero falta uno, y de ese uno me gustaría hablaros ahora, que es el de la igualdad.

Hoy, rendimos homenaje a las mujeres del deporte español. Ya era hora de que lo hiciéramos de manera mucho más visible y sobresaliente. El deporte femenino ha vivido, a menudo, entre la invisibilidad y también la desconsideración. A pesar, de haber contado con deportistas sobresalientes y de ofrecer tanto como el masculino, belleza deportiva, espectáculo y ejemplo.

Algo ha empezado a cambiar, eso es evidente, como en el reto de los ámbitos de la sociedad. Y ya no puede haber marcha atrás.

En las últimas semanas, por ejemplo, hemos visto cómo por fin, se llenaban los estadios para contemplar partidos de fútbol: fútbol femenino. Pero en los últimos meses hemos visto, además, que la selección española de Baloncesto, de Fútbol Sub17, de Fútbol Sub20, o de Waterpolo, no sólo triunfan, sino que acaparan la atención preferente de los aficionados y su aplauso.

Y ayer mismo, sin ir más lejos, en los campeonatos europeos de kárate, la Delegación Española consiguió cinco medallas de oro, tres de ellas en categorías femeninas. Y la Selección Española de Rugby femenino logró el campeonato de Europa, su séptimo título, con récord de asistencia en la ciudad de Madrid.

Las mujeres han conquistado cualquier deporte, incluso aquellos que por estereotipo fueron considerados masculinos. La halterofilia, con Lidia Valentín; el boxeo, con Joana Pastrana. Joana me apunto los deberes que también nos has señalado al Estado, es decir, al Gobierno. O el Rugby, como acabo de mencionar.

El deporte es también el pie de igualdad de las mujeres, sus logros, sus méritos, sus laureles, deben recibir la misma admiración. Y no debe volver a existir ningún tipo de limitación. Esta igualdad creciente, estoy seguro traerá en el futuro muchos nombres, y muchos más de mujer.

Pero hoy queremos rendir homenaje a las mujeres que cuando era más difícil ya estuvieron ahí. A mujeres que hicieron del deporte su vida. A mujeres que, como Edurne Pasaban llegaron a la cima. A mujeres que nos dieron instantes de gloria y dejaron un modelo a seguir. Su ejemplo es doble, amigos y amigas. Su merecimiento es doble. "Los sueños pueden con todo", decía Carolina Marín, la campeona del mundo de Bádminton, que nos ha acompañado a través de un vídeo, que tantas alegrías deportivas nos está dando, y qué tanto ha hecho para recuperar en nuestro país un hermoso deporte minoritario.

Los sueños pueden con todo. Y es cierto. Incluso cuando no se cumplen, los sueños nos arrastran; nos obligan a superarnos y nos dan el triunfo. Triunfos que, a veces, son campeonatos, títulos y medallas, pero que otras veces son simplemente la satisfacción de haber alcanzado la meta. De vivir plenamente en nuestro cuerpo, y de sentir lo que significa eso.

Sigamos haciéndolo. Sigamos extendiendo la pasión del deporte.

Gracias.

(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)