Conferencia de prensa del presidente del Gobierno después de la Cumbre del G-20

Intervención del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy

6.9.2013

  • x: abre ventana nueva
  • Whatsapp: abre ventana nueva
  • Linkedin: abre ventana nueva
  • Enviar por correo: abre ventana nueva

Presidente.- Señoras y señores, muy buenas tardes y muchas gracias por su asistencia a esta convocatoria.

Voy a dar cuenta, de manera breve y sucinta, de los acuerdos que se han adoptado en la reunión del G-20 que, como todos ustedes saben, ha tenido lugar entre los días de ayer y de hoy aquí, en San Petersburgo. Luego responderé a lo que ustedes tengan a bien preguntar.

El G-20 y sus miembros hemos reafirmado nuestro compromiso con el crecimiento sólido, sostenible, equilibrado y creador de empleo. Hay, y éste es un dato importante, un reconocimiento de una mejora generalizada de la situación económica tras la Cumbre de Los Cabos, que tuvo lugar en junio de año pasado, como todos ustedes a buen seguro recuerdan; pero todo el mundo coincide en que la recuperación es aún débil, en que el crecimiento no es el deseado y en que el desempleo, especialmente el desempleo juvenil, es absolutamente inaceptable. Por tanto, el reto sigue siendo para todos fortalecer la recuperación económica, crecer y generar puestos de trabajo, especialmente para las personas más jóvenes.

Quiero decir en este sentido que las cosas, y así se lo he explicado a nuestros colegas, en España desde la última reunión del G-20, que, vuelvo a recordar, tuvo lugar el año pasado en México, han cambiado. El año pasado el debate en España era si España iba o no a ser objeto de un rescate; de lo que se hablaba era de las subidas, que nunca terminaban, de la prima de riesgo y de lo que se hablaba también era del futuro del euro: de si iba a haber una Europa a dos velocidades, si el euro se iba a mantener como moneda, etc., etc.

Hoy, por suerte, en España no se habla de eso, España tampoco es noticia por eso y hoy de lo que se habla, fundamentalmente, es de que vamos a salir de la recesión económica y de cuándo vamos a superar definitivamente la crisis y crear empleo de una manera sostenida y estable.

Pero, en cualquier caso, en España, al igual que en otros países, aunque se hayan producido avances, lo cierto es que los retos son mayores que los avances que se han producido, y el reto es crecer y el reto es crear empleo para así mejorar el nivel de bienestar de todos los ciudadanos que, al fin y a la postre, es lo que todos los Gobiernos estamos persiguiendo.

Para abordar todos estos retos hemos aprobado aquí, los distintos países, el Plan de Acción de San Petersburgo, con compromisos específicos por países para los próximos años. Yo les destacaré los compromisos más importantes que nosotros hemos asumido, tanto a nivel europeo, como a nivel español.

Por lo que se refiere a España, el G-20 reconoce que hemos cumplido de forma muy satisfactoria todos los compromisos que asumimos el año pasado en Los Cabos y que nuestro país ha desarrollado una estrategia fiscal creíble que ha conseguido anclar las expectativas. Este hecho merece una especial valoración porque, como ustedes saben, se ha reducido el déficit público en un periodo de recesión económica, lo cual es especialmente complejo y difícil.

El G-20 recomienda que la estrategia fiscal se ejecute de forma flexible para acomodar las condiciones económicas del corto plazo y apoyar el crecimiento y el empleo, a la vez que se preserva la sostenibilidad fiscal. En este sentido, España ha asumido el compromiso, que está en nuestro Plan de Estabilidad, de comenzar a reducir el ratio de deuda pública sobre PIB a partir del año 2016.

Hemos asumido, además, tres compromisos en materia de reformas estructurales. Primero, adopción de medidas para impulsar el emprendimiento, la creación de Pymes, reducir la burocracia, mejorar la financiación de la internacionalización de nuestras Pymes y reducir su carga fiscal. Ésta es la línea de trabajo que ya lleva manteniendo el Gobierno, que se ha plasmado en la Ley de Emprendedores y sobre la cual vamos a seguir profundizando en el futuro.

En segundo lugar, nos hemos comprometido --un tema muy importante para la competitividad de nuestras empresas y, por tanto, para poder crecer y crear empleo en nuestro país-- a adoptar un marco legal para garantizar la unidad regulatoria del mercado. Como saben ustedes, está en tramitación una Ley de Unidad de Mercado, que ya hemos aprobado en el Consejo de Ministros, que dará cumplimiento a ese compromiso y que esperamos que vaya a añadir 1,5 puntos porcentuales al PIB en los próximos años.

Por último, Ley de Desindexación de la Economía --también figura en nuestro Programa de Reformas, el que hemos aprobado el Gobierno-- y lo que pretendemos es eliminar la indexación a la inflación para evitar, así, el riesgo de la deriva inflacionista de la economía.

Por último, también --yo a esto le doy importancia-- los miembros del G-20 renuevan su compromiso con el reequilibrio de la demanda global. Las economías con superávit deben impulsar su demanda interna, mientras que las economías con déficit deben aumentar su ahorro y mejorar su competitividad.

En este aspecto a España no se le piden nuevas medidas, porque nuestro país ha protagonizado un proceso de recuperación de la competitividad muy importante. Yo les recuerdo a ustedes que en el año 2007 el déficit del sector exterior en España era del 11 por 100 del PIB y este año vamos a tener, por primera vez, superávit en nuestra balanza de pagos por cuenta corriente y de capital. Las exportaciones están mejorando, más de un 9 por 100 en el interanual; las exportaciones, tradicionalmente siempre a los países de la zona euro, ya están aumentando a otras zonas del mundo y, desde ese punto de vista, estamos muy satisfechos del esfuerzo de nuestras empresas. Es importante que sigan vendiendo fuera, porque producir en España es dar trabajo en España y, al mismo tiempo, es no necesitar de la financiación de fuera e ir poco a poco pagando nuestra deuda acumulada a lo largo de muchos años.

En la sesión de esta mañana hemos abordado un tema capital para nuestro país y uno de los grandes objetivos del Gobierno, la creación de empleo, que también es uno de los grandes objetivos para el G-20. Yo expuse la posición española sobre este asunto y se la voy a resumir brevemente, porque ya me la habrán escuchado en numerosas ocasiones. Para crear empleo, fundamentalmente, lo que hay que hacer es crecer y para crecer hay que combinar inteligentemente políticas fiscales con política monetaria y cambiaria razonable, y, al mismo tiempo, hacer reformas estructurales.

He hecho referencia a la reforma laboral, que ya está en vigor en nuestro país, que hemos aprobado nosotros. Todos los países se han comprometido a que distintos organismos internacionales hagan una revisión de la situación de su legislación laboral. Nosotros se lo hemos encargado, como ustedes saben, a la OCDE, era un compromiso ante la Unión Europea; pero creemos que ha evitado la destrucción de 225.000 puestos de trabajo desde su entrada en vigor y que, cuando en España aumente la actividad y comience el crecimiento, esta reforma laboral va a ser una magnífica palanca para el crecimiento del empleo en nuestro país.

Hablé también de la formación y de la educación como instrumentos específicos y muy necesarios para generar empleo en nuestro país.

Por lo que se refiere a los compromisos de la Unión Europea --yo también le doy importancia a este asunto, estoy convencido de que también me han oído hablar de él en numerosas ocasiones--, se le pide a la Unión Europea que profundice para conseguir una genuina unión económica y monetaria, y mejorar su funcionamiento. La Unión Europea deberá acabar con la fragmentación de los mercados financieros. Y se hace una apuesta clara y contundente en el G-20 por la unión bancaria, donde ya ha habido avances; pero donde España ha demandado, y otros países, que los avances no se paren y que, a ser posible, se vayan acelerando. Por tanto, en esto estamos muy satisfechos, porque coincide con lo que han sido nuestros planteamientos a lo largo de este año y medio largo.

También hemos hablado --ha sido la última sesión de trabajo-- del comercio internacional, que, como ustedes saben, es un importante motor del crecimiento económico. Hemos acordado, entre otras cosas, renovar la llamada cláusula "standstill", por la cual nos comprometemos a no adoptar nuevas medidas proteccionistas hasta el año 2016. En la Cumbre de Los Cabos el plazo era hasta el año 2014, éste es a 2016 y esta cláusula incluye, ya desde el año pasado por petición nuestra en Los Cabos, no sólo bienes y servicios, sino también inversiones.

Por último, también hemos hablado de un tema del que se ha preocupado la Unión Europea y que está dentro de unas prioridades de nuestro Gobierno, que es el apoyo al plan de la OCDE contra la evasión fiscal y el avance hacia un sistema de intercambio automático de información fiscal, que estará operativo antes del año 2015.

En fin, éstos son, sustancialmente, los temas que se han tratado en esta reunión del G-20. Si me preguntan por mi opinión, yo estoy satisfecho. Han sido reuniones de trabajo muy densas, porque los temas que se tratan no son menores; son temas muy importantes. Yo he tenido la oportunidad, la posibilidad, de explicar qué es lo que habíamos hecho y qué es lo que pretendemos hacer en el futuro. Como les dije antes, hoy podemos decir que estamos mucho mejor que como estábamos el año pasado en la última reunión del G-20 y yo espero que el año que viene les pueda decir a todos ustedes que este año 2013 es un año peor que el año 2014. Estoy convencido de que así va a ser. Hay signos alentadores en la economía española. Hay todavía muchísimos objetivos a conseguir y muchísimos desequilibrios que corregir, y muchas reformas que hacer; pero creo, y eso podemos y debemos celebrarlo todos, que estamos mucho mejor que hace un año.

Estoy a su disposición.