Artículo del presidente del Gobierno Pedro Sánchez

España puede: unidos por la recuperación

7.2.2021

  • x: abre ventana nueva
  • Whatsapp: abre ventana nueva
  • Linkedin: abre ventana nueva
  • Enviar por correo: abre ventana nueva

En 2021, la economía española deberá hacer frente todavía a la continua incertidumbre
derivada de la emergencia sanitaria. Por eso, la política económica
deberá seguir protegiendo a los más vulnerables y estimulando al mismo
tiempo la recuperación.

El punto de partida de este año nos permite ser relativamente optimistas,
aunque somos conscientes del camino que queda por recorrer. A pesar
de la histórica caída de la actividad durante el primer semestre de 2020, el
crecimiento del segundo semestre ha permitido recuperar el 60% de la caída
inicial acumulada. Por eso la caída del PIB en el conjunto del año, del 11%,
ha sido más suave que lo esperado por los analistas y los organismos internacionales,
e incluso ligeramente inferior a lo previsto por el propio Gobierno,
que hizo una estimación prudente.

En todo este proceso, las medidas de protección de rentas de los hogares
y de financiación de las empresas han sido fundamentales: han limitado el
efecto de una crisis devastadora para todos.

Las medidas tomadas a nivel europeo han jugado un papel crucial. Gracias
a un acuerdo histórico en el Consejo Europeo, se movilizarán hasta
750.000 millones de euros financiados mediante la emisión de deuda comunitaria,
a los que habrá que sumar los 1'074 billones de euros del Marco
Financiero Plurianual 2021-2027. En este reparto, la inversión verde representará
al menos un 37% del total, y la digital, otra de las prioridades marcadas
por la Comisión Europea, el 33%.

Esta ingente movilización de recursos supone la mayor oportunidad
de las últimas cuatro décadas para la transformación de nuestro país.
El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que tuve
la oportunidad de presentar el pasado 7 de octubre, es un plan coordinado
de inversiones y reformas, en el que ambas deberán reforzarse
mutuamente para permitir que la recuperación económica
sea más vigorosa y justa que la que vivimos en 2008.

Contribuirá al aumento de la productividad, al crecimiento
potencial de nuestro país y a la reducción del desempleo estructural
-que afecta especialmente a los jóvenes-; favorecerá
la creación y la competitividad de nuestras empresas; permitirá
la transición hacia un sistema energético limpio, el impulso
a la ciencia y la I+D+i, y la rehabilitación urbanística para conseguir
ciudades más saludables; y facilitará una mejora en la distribución de
la renta gracias al refuerzo de la igualdad de oportunidades y del Estado
del Bienestar.

El Gobierno prevé para 2021 un crecimiento inercial del 7%, cifra que podría
aumentar al añadirse el impacto de los 27.000 millones de euros de fondos
europeos que se han incluido en los Presupuestos Generales del Estado.

Nuestro objetivo es seguir protegiendo a los más vulnerables, salvaguardar
el tejido productivo -como se ha hecho a través de los ERTE- y lanzar incentivos
para la reactivación de la economía. Todo ello, junto con la implementación
del PRTR, deberá impulsar el crecimiento sustancialmente.

Para conseguirlo, sin embargo, es fundamental que todos -Gobierno,
oposición, agentes sociales, Comunidades Autónomas y el resto de administraciones-
trabajemos juntos, sumando esfuerzos y mostrando la máxima
responsabilidad. Solo así lograremos un crecimiento sostenible y sólido
sin dejar a nadie atrás.