Zoido: "Gracias al ejemplo ético de las víctimas del terrorismo, España es hoy una sociedad madura que sabe distinguir perfectamente a las víctimas de los verdugos"

"Gracias al ejemplo ético de las víctimas del terrorismo, España es hoy una sociedad madura que sabe distinguir perfectamente a las víctimas de los verdugos", afirmó el ministro del Interior durante el acto celebrado en la plaza de la Esperanza, lugar donde se encontraba en aquellos años la casa-cuartel de la Guardia Civil donde se produjo el atentado terrorista.

Acompañado, entre otras autoridades, por el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán; el delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde; el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve; el director general de la Guardia Civil, José Manuel Holgado; la presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Marimar Blanco y la presidenta de honor de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángeles Pedraza, el ministro del Interior visitó una exposición fotográfica sobre aquellos años y asistió a una misa en recuerdo de las víctimas de ese atentado en la iglesia parroquial de San Pío X.

Posteriormente la comitiva se trasladó a la Plaza de la Esperanza, donde se ubicaba la casa cuartel de la capital aragonesa, para rendir tributo a las a las víctimas y heridos del atentado con una ofrenda floral que culminó con el Homenaje a los Caídos.

En deuda con la Guardia Civil y la Policía

En ese acto, Zoido tuvo palabras de reconocimiento a las víctimas del terrorismo, que siempre "dan una lección de dignidad y reclaman la proclamación de la verdad de lo sucedido". "Y gracias a su ejemplo, los españoles hemos sido capaces de afrontar de manera responsable los riesgos sin cambiar nuestro modo de vida ni los valores democráticos, esos que ETA no respetó y que ahora amenaza el terrorismo yihadista", apuntó.

Para el ministro, la derrota de ETA fue posible gracias al ejemplo y al testimonio de las víctimas, al compromiso de jueces y fiscales, a la cooperación internacional, y a la dedicación y entrega de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. "España-añadió Zoido-está en deuda con la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía, las instituciones más castigadas por la banda terrorista".

"Actos de homenaje y de recuerdo con éste deben servirnos para renovar nuestro compromiso de seguir, como hasta ahora, trabajando todos juntos hasta conseguir que ETA se disuelva definitivamente, entregue las armas, termine de pagar lo que hizo, pida perdón a las víctimas y se arrepienta de todo el sufrimiento causado. Y también-subrayó Zoido-para seguir firmes hasta conseguir derrotar al yihadismo como hicimos con ETA".

Exposición en Museo Provincial de Zaragoza

El día comenzó con la inauguración de una exposición sobre el atentado en el Museo Provincial de Zaragoza. La muestra tiene como objetivo honrar la memoria de las víctimas y mostrar la vileza de los asesinos y podrá visitarse hasta el próximo domingo, 17 de diciembre.

Cuenta con una selección de fotografías de la Agencia EFE y del Heraldo de Aragón sobre la devastación, las labores de rescate, los funerales, las manifestaciones de protesta y los homenajes públicos en los aniversarios. La muestra se completa con un In Memoriam por las 11 víctimas mortales, una reproducción del coche-bomba, un audiovisual con testimonios de diversos protagonistas y, finalmente, un espacio de documentación con portadas de prensa de la época.

"Duele, pero tenemos que seguir recordando ese día para que las nuevas generaciones sepan la verdad de lo que pasó. Porque gracias al ejemplo ético de las víctimas del terrorismo España es hoy una sociedad madura que sabe distinguir perfectamente a las víctimas de los verdugos", apuntó el ministro.

Atentado contra la Casa Cuartel de Zaragoza

El viernes 11 de diciembre de 1987, a las 06:00 de la mañana, la banda terrorista ETA colocó un coche-bomba cargado con 250 kilos de amonal junto a la Casa Cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza.

La explosión derrumbó parte del edificio y acabó con la vida de 11 personas, entre ellos cinco niños y un adolescente, e hirió a otras 73, varias de ellas muy graves.

Los autores del atentado fueron cuatro etarras del "Comando Argala", formado por ciudadanos franceses dirigidos por Henri Parot, que fue detenido en Sevilla en 1990 y condenado por la Audiencia Nacional en 1994 a más de 1.800 años de prisión por su responsabilidad criminal. Su hermano Jean Parot, Jacques Esnal y Fréderic Haramboure le acompañaron en la ejecución del atentado y fueron condenados a cadena perpetua por un Tribunal de París en 1997. Los jefes de ETA Francisco Múgica Garmendia "Pakito" y José María Arregui Erostabe "Fiti", fueron sentenciados en 2003 a un total de 2.354 años de reclusión por haber dado la orden de atacar el acuartelamiento y por proporcionar la logística necesaria.