España promueve la lucha contra el tráfico de órganos y el turismo de trasplantes

12.7.2017

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Para promover esta iniciativa, España, junto con Guatemala, Sudáfrica y Tailandia, ha organizado una reunión abierta sobre la trata de seres humanos con fines de extracción de órganos, el tráfico de órganos y el turismo de trasplantes.

A la reunión, celebrada en la sede de Naciones Unidas en Nueva York, han asistido la directora de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Beatriz Domínguez-Gil, el director del programa de trasplantes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), José Ramón Núñez, y el expresidente de la Sociedad Internacional de Trasplantes (TTS), Francis Delmonico.

La directora de la ONT defendió la importancia de lograr la autosuficiencia en trasplantes, en la que se basa el modelo español de trasplantes y abogó por su extensión al mayor número posible de países, como una solución que, junto con una política adecuada de lucha contra el tráfico de órganos, puede dar resultados positivos en todo el mundo. En su intervención, Domínguez-Gil destacó los filtros y controles del sistema español de trasplantes que garantizan el altruismo, la voluntariedad y los principios éticos en la donación de vivo.

Durante la reunión, el Embajador Representante Permanente de España ante las Naciones Unidas, Román Oyarzun, presentó la resolución promovida por España sobre la trata de seres humanos con fines de extracción de órganos y el tráfico de órganos.

La propuesta busca reforzar la cooperación internacional para prevenir y combatir eficazmente tales actividades, fomentar la creación de sistemas nacionales transparentes de donación de órganos, realizar una labor de información y sensibilización dirigida a fomentar una actitud positiva de la sociedad respecto de la donación e instar a los Estados a que desarrollen en su legislación interna vías de protección de las víctimas y adecuada reparación por parte de los perpetradores.

Según la OMS, entre el 5% y el 10% de todos los trasplantes en el mundo se realizan bajo alguna forma de comercialización, generalmente en forma de turismo de trasplantes. De acuerdo con el último informe del Observatorio Mundial de Trasplantes, que gestiona la ONT en España por designación de la OMS, se estima en torno a 35.000 los trasplantes de riñón de donante vivo efectuados en todo el mundo, lo que eleva a 3.500 las posibles intervenciones renales realizadas bajo alguna forma de comercialización.

El tráfico de órganos es un fenómeno creciente y multidimensional. No sólo es un delito y una violación de los derechos humanos de las víctimas, sino que también plantea un problema de salud pública, pues las intervenciones fuera de los sistemas legales carecen de control y de las garantías necesarias.

Además, la forma más frecuente de tráfico de órganos sucede en el contexto del denominado turismo de trasplantes, que posibilita que enfermos con recursos económicos procedentes de países con insuficiencia de órganos viajen a países en vías de desarrollo en los que la legislación contra la compraventa de órganos es inexistente o insuficiente y donde las personas en situación de pobreza extrema, a menudo víctimas de explotación y coerción, están dispuestas a desprenderse de un órgano.