Intervención del presidente del Gobierno tras recibir al presidente de la República de Portugal

Muy buenas tardes a todos y muchas gracias por su asistencia.

Para mí es un honor y una enorme satisfacción recibir aquí en el Palacio de la Moncloa al presidente de la República Portuguesa, Marcelo Rebelo de Sousa.

Esta visita que, como saben, es una visita de Estado, pone de manifiesto las magníficas relaciones que van mucho más allá de la pura relación geográfica, magníficas relaciones entre Portugal y España.

Hay muchas coincidencias, de pasado, pero sobre todo, de futuro. De pasado, porque ambos países vivimos una crisis económica durísima, que nos ha afectado a todos, a mucha gente, pero ambos países, al final, con el esfuerzo de los ciudadanos, y con las políticas de los Gobiernos, pues hemos logrado salir de la crisis. Hoy, hay crecimiento económico, en Portugal y en España. Hoy se crea empleo, se reduce el déficit público y va mejorando la vida de las personas.

Hay un dato que me parece muy significativo, y que creo que es la consecuencia del esfuerzo que han hecho ambos países, Portugal y España, es el nombramiento como presidente del Eurogrupo del ministro de Economía y Hacienda de Portugal, y del nombramiento como vicepresidente del Banco Central Europeo el exministro de Economía español, don Luis de Guindos.

Como saben ustedes, el año pasado se cumplieron cuarenta años del Tratado de Amistad y Cooperación entre nuestros dos países, y desde entonces las cosas siempre han ido a mejor, y nuestras relaciones se han ido intensificando.

Este año vamos a celebrar, --toca en España--, la trigésima Cumbre bilateral entre España y Portugal, que es un magnífico marco para tratar los asuntos que nos afectan a los dos países.

Una faceta muy importante de estas relaciones son las interconexiones con Francia; interconexiones por las que ambos países llevamos trabajando y batallando desde hace mucho tiempo, y está prevista la celebración en Lisboa, en el primer semestre de este año de una Cumbre, a la que asistirá también el presidente francés, Macron, y el presidente de la Comisión, el señor Juncker.

En el ámbito comercial, Portugal es el cuarto destino de nuestras exportaciones, y nuestro octavo proveedor. Y actualmente hay 2.500 empresas españolas que, con sus filiales, se encuentran en Portugal en sectores tan variados como la banca, la energía o la distribución minorista.

Además, como saben, nuestras relaciones no son solo bilaterales, sino que formamos parte de la Comunidad Iberoamericana de Naciones y ambos países estamos en la Unión Europea. Ambos países queremos seguir trabajando juntos con la Comunidad Iberoamericana y apostamos decididamente por el proyecto europeo

Quería referirme a tres temas, donde creo que las coincidencias son totales y ambos Gobiernos pues llevan tiempo buscando entendimiento.

En primer lugar, el Brexit: nos importan fundamentalmente, los ciudadanos, los portugueses y los españoles, y los intereses, también, de nuestras empresas que, al final, son los intereses de nuestros ciudadanos. Queremos que las cosas se hagan bien, de manera ordenada, y mantener una buena relación con el Reino Unido.

En segundo lugar, hay otro asunto que nos preocupa mucho. Pronto empieza a negociarse lo que técnicamente se conoce como el Marco Financiero Plurianual, en realidad son los Presupuestos de la Unión Europea. Portugal y España, así lo hemos acordado, vamos a dar la batalla en dos temas que nos importan mucho; en primer lugar, en las políticas de cohesión. Y, en segundo lugar, las políticas agrarias. Nos importan los intereses de nuestros agricultores, el desarrollo rural, los pueblos pequeños de nuestros países. Va a ser una discusión, como siempre, difícil, pero estoy convencido de que llegaremos entre todos a un entendimiento.

Y, en tercer lugar, estamos de acuerdo, también, en seguir profundizando en un proceso en el que todos creemos, que es el proceso europeo. Creemos ambos países que hay que dar un empuje a la Unión Económica y Monetaria. No se trata sólo de cerrar la Unión Bancaria, sino de comenzar, también, a trabajar para que haya, en un determinado momento, un Presupuesto europeo y una Unión Fiscal que evite situaciones como las que hemos vivido en los últimos tiempos en esta crisis que a todos nos ha azotado.

Y termino ya esta intervención.

Quiero volver agradecer al presidente de la República Portuguesa que nos haya acompañado a lo largo de estos días; mañana estará también como saben, en Salamanca, es algo que allí --aquí también-- pero allí va a ser muy bien valorado y recalcar, como decía al principio, que nuestras relaciones ya están por encima de la geografía, que también nos une. Pero nos unen, por fortuna, muchas más cosas, probablemente, algunas a las que me he referido en mi intervención lo son, pero creo que la más importante es el afecto entre los dos pueblos.

Muchas gracias.

(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)