Intervención del presidente del Gobierno tras la firma de los acuerdos de colaboración para la rehabilitación del Antiguo Hospital de la Concepción como nueva sede del Archivo Histórico Provincial y ampliación del Museo de Burgos

2.5.2018

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Burgos

Señor presidente de la Junta de Castilla y León, señor ministro de Educación, Cultura y Deporte, señor alcalde, señora consejera, señora presidenta del Parlamento, señor rector, autoridades, señoras y señores, queridas amigas y amigos:

Muchas gracias por ofrecerme la oportunidad de estar hoy aquí, en Burgos, pasando esta jornada con todos ustedes y muchas gracias por invitarme, precisamente, para asistir a un acto como este. En España también ocurren cosas positivas y en España también hay buenas noticias, y creo que es bueno contarlas y que las cuenten.

Se acaban de firmar, como ustedes saben, y como acabamos de escuchar, dos acuerdos; son acuerdos que demuestran a la perfección, como también se ha dicho aquí esta mañana, que el diálogo, el trabajo conjunto y la colaboración institucional son el mejor instrumento para mejorar la vida de la gente, para dinamizar las ciudades y para compartir todos juntos un proyecto de nación.

Por una parte se ha rubricado un acuerdo relativo a la esperada ampliación y rehabilitación del Museo de Burgos que supondrá, como saben, la creación de una sección de Arte Contemporáneo y permitirá que el público tenga acceso a más fondos del Museo, como el legado del pintor burgalés Luis Sáez, citado en su intervención por el presidente de la Junta de Castilla y León.

El segundo de los acuerdos permitirá recuperar un edificio emblemático de Burgos, que ha tenido diferentes usos a lo largo de su historia y que puede presumir de haber acogido, y a ello se refería el rector en su intervención, nada más, ni nada menos, que a Santa Teresa de Jesús. Este hospital de la Concepción en el que hoy nos encontramos es, como hoy se ha dicho, uno de los monumentos civiles más importantes de la ciudad y, con este acuerdo, pasa a simbolizar, además, un pacto entre generaciones, porque este edificio va a volcarse al mismo tiempo en el pasado y en el futuro: en relación al pasado, como sede del Archivo Histórico Provincial de Burgos; y respecto al futuro, porque será también un edificio dedicado a la universidad que es la institución que mejor representa, sin duda alguna, como hemos escuchado aquí esta mañana, el compromiso con los españoles del mañana. Pasado y futuro son, por tanto, el presente de Burgos, una ciudad que brilla, como pocas, por su enorme legado histórico y cultural y por sus magníficas posibilidades y potencialidades.

Hablar de Burgos es hablar del legítimo orgullo que todos los españoles sentimos por esta tierra y por sus gentes. El patrimonio que acumula esta ciudad nos da conciencia de nuestra historia y de nuestras raíces comunes. Una historia y unas raíces que, desde la pluralidad, la libertad, y el respeto a las diversas manifestaciones artísticas y culturales que atesora España, nos hacen más fuertes como sociedad, nos unen y nos enriquecen.

Nuestro pasado, además, nos conecta con el mundo, porque lo que la cultura une, trasciende la distancia en kilómetros, las fronteras entre países o, incluso, el propio tiempo como unidad de medida. Cuando uno recorre las calles de Burgos ve el peso y el poso de la historia, ve una ciudad que ha ido integrando ideas, influencias y avances para mirar siempre más allá de sus lindes hacia el futuro y con ambición.

En Burgos, uno se da cuenta de que los vestigios del pasado son, precisamente, las obras que se diseñaron pensando en el futuro. Esta siempre ha sido una ciudad abierta y de vanguardia, llena de arte, cultura y tradición y es así también gracias a su posición estratégica. Ocupa un lugar importante en la historia y también en el transcurso del Camino de Santiago, lo hace en forma de iglesias, hospitales y albergues de peregrinos pero, también, a través de un magnífico legado inmaterial.

En una época en la que las distancias y las comunicaciones parecían retos insalvables, el Camino de Santiago, a su paso por Burgos, constituyó una forma de contacto, de intercambio cultural y un encuentro de valores que forman parte del mejor patrimonio de España y de Europa, un patrimonio que estamos obligados a proteger y a preservar. Gracias a ello, en Burgos podemos contemplar y disfrutar de un acervo cultural que nos representa y que nos une a todos, una cultura que en su diversidad, ha vertebrado España por encima de la geografía, las distancias y las generaciones.

Señoras y señores, hoy también, como se ha recordado aquí esta mañana, voy a tener el honor de visitar la Catedral de Burgos, que ha inspirado con su ejemplo buena parte de los templos góticos que años después construyó España. Una magnífica obra monumental en cuyo entorno, como en muchas ciudades españolas y europeas se ha aglutinado el saber, la historia, la cultura y el arte. Vuestra Catedral es un orgullo para España y para el mundo, y así lo reconoció la UNESCO en 1984 declarándola Patrimonio de la Humanidad. Dentro de poco tiempo, todos lo sabéis, en 2021, celebrará su VIII centenario. Creo que esta conmemoración es un asunto de Estado, y es algo que nos concierne a todos. Sé que es un sentimiento compartido, especialmente por los burgaleses y lo demuestra el trabajo admirable y concienzudo que desde julio del año pasado llevan a cabo desde la Fundación del VIII Centenario de la Catedral. Esta Fundación cuyo trabajo quiero agradecer de forma muy especial, tiene el propósito de congregar el empuje y los apoyos de la administración, las instituciones y la sociedad civil para crear un gran programa que realce el Centenario de la Catedral y haga de este acontecimiento una celebración de la diversidad y riqueza cultural de España.

En consonancia con su labor, como hemos escuchado esta mañana, tengo que decir que el Gobierno de España, en los Presupuestos Generales del Estado que se están tramitando hoy en el Congreso de los Diputados, ha reconocido este Centenario como acontecimiento de excepcional interés público y ya está en marcha la constitución de una comisión interadministrativa que conocerá y aprobará todos los proyectos impulsados desde la Fundación, que van a gozar de los beneficios, de los oportunos beneficios fiscales.

Además, la celebración del Centenario de la catedral de Burgos, va a servir para reivindicar la importancia de otros bienes españoles reconocidos por la UNESCO, como son el Camino de Santiago. Precisamente, 2021 es Año Santo, después de muchos años sin que lo fuera y, para mí, como santiagués que he nacido a cien metros de la Catedral de Santiago, realmente, esto también tiene un significado personal muy especial y muy emotivo. También, los yacimientos de la Sierra de Atapuerca, que junto con la promoción del geoparque de las Loras y de la lengua española a través de su vinculación literaria con el Cid, estructuran una celebración de la cultura como elemento de unión.

Yo creo, sinceramente, que estamos ante una inmejorable oportunidad para dar un impulso al futuro de Burgos, de Castilla-León y de España, y de hacerlo a través de un elemento, la cultura, que generación tras generación se enriquece y cobra nueva fuerza para seguir construyendo las ilusiones y las oportunidades de España como nación.

Y no quisiera terminar esta intervención sin hacer antes un breve comentario sobre la Alta Velocidad, para dar así respuesta a las inquietudes que han manifestado tanto el alcalde como el presidente de la Junta de Castilla y León en su intervención. La obra del AVE entre Venta de Baños y Burgos finalizará a finales de este año 2018, comenzando a continuación el periodo de pruebas, por lo que pronto el AVE Madrid-Burgos será una realidad. Vamos a seguir, además, trabajando intensamente. Las obras desde el punto de vista técnico no son de las más fáciles que se hacen en España, pero vamos a continuar las inversiones para llegar de aquí a Vitoria y, luego, como decía el presidente de la Junta en su intervención, continuar al resto del País Vasco y hacia el resto de Europa. Estamos también estudiando, como recordaba el alcalde en su intervención, el tren de mercancías, hemos tenido varias reuniones en los últimos tiempos, estamos pendientes de algunos informes y, a la vista de eso, el Ministerio de Fomento que verá eso con los mejores ojos --porque yo así se lo diré-- tomará la decisión que sea más oportuna y conveniente para el conjunto de los ciudadanos.

Seguimos trabajando intensamente en las obras de infraestructuras, sobre la base de que las infraestructuras son un elemento determinante para muchas cosas, lo son para la comodidad de la gente porque, sin duda alguna, unos buenos trenes o unas buenas carreteras ayudan a ese confort al que todos aspiramos y al bienestar de los ciudadanos. Pero también son un elemento de competitividad decisivo para el conjunto de la economía; la economía que, al final, se traduce si va bien, en mayor bienestar, mejores servicios públicos y elevación del nivel de vida de la gente, requiere de muchas cosas, la primera y la más importante, requiere de empresarios y de gente que sea capaz de tomar iniciativas pero, luego, influyen muchas cosas: los impuestos, el adaptarse ahora a las nuevas tecnologías, los mundos en que vivimos, esa España digital en la que estamos trabajando, no queremos llegar tarde a ninguna otra revolución más y, desde luego, a la revolución digital España no va a llegar tarde pero, también ahí, dentro de esos elementos que contribuyen a la competitividad y, por tanto, al bienestar de la gente están --sin duda--, las infraestructuras.

España tiene un nivel de infraestructuras muy elevado, de los mejores de Europa, basta simplemente con darse un paseo por allí, tanto infraestructuras ferroviarias como autovías, autopistas y carreteras. Sin duda alguna, quedan todavía, algunas por hacer, algunas están cerca de aquí y, como he dicho en mi intervención, haremos cuanto esté en nuestras manos para que, con la mayor celeridad posible, ya no tengamos que hablar de cuándo se va a terminar una obra sino de que la estamos disfrutando.

Señoras y señores, ha sido un honor estar aquí, creo que este es un acto muy bonito, de los que reconfortan a uno personalmente y le dan sentido, también, a dedicarse a la actividad pública donde, como saben ustedes, hay cosas más bonitas, como esta, y otras que no lo son tanto y no me acuerdo de ninguna.

Muchas gracias.

(Transcripción editada por la Secretaría de Estado de Comunicación)

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